En Fray Luis Beltrán dejaron la lista de cesantías en una garita. Los telegramas no llegaron y ningún directivo habló. El intendente Cominelli recibió a trabajadores y enfatizó el retiro del Estado nacional: FM era su única presencia en la ciudad, que no tiene sede de ANSES ni del Banco Nación.
Transmisión en Vivo: Gabriel Gómez fiori entrevista a Alberto Labudia, Pablo Torres, Raúl Daz, trabajadores y familiares. Viernes 17 agosto 21 hs.
Trabajadores de Fábrica Militar de todo el país iniciaron este martes un paro general por los despidos comunicados en varias plantas de la empresa estatal, que está bajo la órbita del Ministerio de Defensa de la nación. La provincia de Santa Fe está particularmente afectada por el recorte decidido desde el Ejecutivo central: son 49 las cesantías en la fábrica de Fray Luis Beltrán. Allí hubo una movilización desde el Torreón por la ruta 11 hasta la Municipalidad local.
El intendente, Mariano Cominelli, recibió a los empleados y referentes gremiales y enfatizó el complejo cuadro que se abate sobre la ciudad: “Esta problemática social nos atraviesa. Es la única repartición nacional que tenemos. No hay sede de ANSES ni del Banco Nación. Manifestaremos nuestra preocupación en los ámbitos institucionales que sean necesarios”, se comprometió el mandatario con el énfasis puesto en el retiro de la jurisdicción federal en esa zona del cordón industrial de Rosario.
“Fueron cobardes. Dejaron la lista de despedidos en una garita y nadie dio la cara. Los compañeros ni siquiera han recibido los telegramas de despidos”, se quejó Raúl Daz, secretario general de ATE Rosario, sobre la manera en la que “comunicaron” las cesantías los directivos de la empresa. En la planta de Beltrán hay varias líneas de producción: pistolas semiautomáticas como las Browning (bajo licencia de la belga FN), fusiles (FAL), chalecos antibalas, municiones y morteros, sin agotar la lista. En la anterior tanda nacional de reducción de planta laboral en la compañía estatal, la sede del cordón industrial de Rosario sufrió 35 bajas en un equipo de personal que suma más de 400 personas.
Córdoba es la otra provincia más complicada. Allí los despidos son en las plantas de Río Tercero –59, sobre sus 439 trabajadores– y Villa María –42 de 375 empleados–, donde se vivieron momentos tensos alimentados por la informalidad de las comunicaciones. Las listas se difundieron de forma nada ortodoxa antes de que partieran los telegramas de despidos e, incluso, las cifras exactas de la sangría laboral son inciertas.
Nota y Fotos: Pablo Soria / ELCIUDADANOWEB.COM