Mientras miles de personas se concentran en el Puente Rosario Victoria en defensa de los humedales y exigen la sanción de una Ley, a pocos kilómetros la vegetación sigue siendo arrasada de modo intencional.
Por el Río Paraná se ven barcazas hacia las islas, llevando máquinas para desmontar y depredar lo que se salvó de las quemas intencionales.
por Irene Schmidt. Directora de PuertoMio.com.ar
Recibimos la queja de vecinos que fueron a pasar el día en la islas y fueron «invitados a retirarse» por las autoridades. Pero estas mismas autoridades parece que «no vieron» la magnitud de las maquinarias de desmonte que pasaban a su lado. A las barcazas no las pararon, no las hicieron volver.
¿No era que está prohibido el desmonte? ¿No era que hay que preservar la flora y la fauna autóctona de la zona de islas? ¿No les bastan las quemas provocadas? la muerte de tantos animales, carpinchos, nutrias, zorros, pumas, yacarés, pájaros etc?
En las islas también hay familias, escuelas primaria y secundaria donde concurren sus niños.
Voy a mencionar el caso de Ramón Acosta, un señor mayor de unos 86 años, que hace más de 60 años que vive en el mismo lugar. Imagínense de repente levantarse y escuchar el ruido de la topadora destruyendo su entorno que es su hogar, sus árboles, su vida. Don Ramón vive en el lote 10 muy cerca de la comisaría Primera Sección islas, Departamento Victoria Entre Ríos. ¿Quién defiende los derechos de Don Ramón? y de las otras familias de isleños?
¿Alguien supuestamente «compra» una isla y manifiesta que tiene derecho de tumbar todo a su paso sin importarle nada ni nadie?. Según las propias autoridades entrerrianas NO hay propiedades ahí, sólo algunos (pocos) permisos de explotación y supuestamente la prohibición de hacer justamente esas cosas como desmontar con topadoras. Se ve una familia tomando mate en la costa pero no se ve ni se oye semejante atrocidad?
Me pregunto: ¿Será verdad que alguna autoridad le otorgó un permiso «legal» a estos empresarios para desmontar lo poco que quedaba y arrasar con todo lo que encuentran a su paso? O será quizá que alguien mira para otro lado a cambio de algo?
¿También van a arrasar el rancho de Don Ramón? Van a matar los pocos animales que tiene para su subsistencia?
Este señor fue explotado por años sin pagarle un sólo peso y de repente ahora se encuentra rodeado de máquinas que aparentemente van a arrasar las 3000 hectáreas de esa isla.
Hasta cuándo la avaricia y ambición de unos pocos se va imponer sobre la Ley, sobre el derecho de los demás y hasta sobre el simple sentido común que manda proteger los humedales y toda la vida natural que albergan?
En este video se muestra cómo va quedando arrasado el terreno y se alcanza a ver la topadora que sigue desmontando. Esta isla tiene una superficie aproximada de 3000 hectáreas.
La máquina que está haciendo el desmonte
¿Qué es un humedal y cuál es su función?
Los humedales contribuyen de modo decisivo al bienestar humano al desempeñar funciones de las cuales se derivan múltiples beneficios. Por ejemplo, son fuentes de agua, mitigan sequías e inundaciones, suministran alimentos, albergan una rica biodiversidad y almacenan carbono, entre muchos otros servicios ecosistémicos.
Son perfectamente compatibles las pequeñas comunidades de pescadores y granjeros que viven allí desde siempre. También hay producciones compatibles como la apicultura. Pero desde que la soja entró a los campos y la codicia extendió la superficie de siembra, el ganado comenzó a ser desplazado hacia las islas. Y el ganado requiere superficies con pastos, no la vegetación habitual de los humedales. Está claro cuál es el problema de fondo, la motivación y la red de responsables.