Ejercitarse físicamente ha demostrado ser un factor de prevención importante frente a muchas de las patologías conocidas, además es un elemento esencial para mantener una buena calidad de vida a lo largo de la misma.
El hecho de incorporar una rutina de ejercicio constante y moderada tiene como consecuencia una serie de cambios fisiológicos dentro del organismo humano que va más allá de la quema de calorías, la actividad física provoca una modificación en la composición del cuerpo, mejorando el metabolismo y los sistemas respiratorio y circulatorio.
Todas las personas se benefician de la actividad física regular, sin importar el sexo, la edad o la capacidad física, llevar una vida saludable es la clave para tener una salud de hierro, el cuerpo humano fue diseñado desde el inicio para mantenerse en movilidad, gracias a los grandes cambios que ha experimentado la sociedad con los años, muchas personas han caído en el sedentarismo al punto de no considerarlo como una práctica necesaria dentro de la rutina diaria.
No solo se trata de ejercicio físico, para mantener una buena salud se debe combinar con una serie de hábitos positivos que incluyen la buena alimentación, beber agua, dormir lo suficiente, entre otros. La vida sedentaria es uno de los factores con más riesgo de mortalidad, siendo la cuarta a nivel mundial, solamente superada por el tabaquismo, la hipertensión y la hiperglucemia.
Ayuda a controlar el peso
Realizar ejercicios constantemente puede ayudar a prevenir el aumento excesivo del peso o mantener la pérdida del mismo, al realizar actividad física el cuerpo quema calorías, hacerlo no significa matarse en un gimnasio o correr por horas, el ejercicio se refiere a cualquier movimiento corporal producido por los músculos con un suficiente consumo de energía.
Incluye la realización de deportes, trotar, bailar, caminar, practicar relaciones sexuales con escorts en Buenos Aires y todo lo relacionado con los movimientos, lo importante es cosechar los beneficios incorporando buenas prácticas al día a día.
Combate las enfermedades
Una de las preocupaciones más grandes a nivel mundial está relacionada con las enfermedades cardiacas, producidas en parte por la mala dieta alimentaria y la poca actividad física. Sin importar el peso, realizar ejercicio ayuda a prevenir la presión arterial alta, al estar activo el cuerpo aumenta el colesterol bueno o también llamado HDL y reduce los triglicéridos, haciendo fluir la sangre sin riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Algunas de las otras enfermedades que ayuda a regular el mantenerse sano con una rutina de ejercicio son las siguientes:
- Síndrome metabólico
- Presión arterial alta
- Diabetes tipo 2
- Ansiedad
- Depresión
- Varios tipos de cáncer
- Artritis
El ejercicio como una actividad social
La actividad física puede ser agradable, da la oportunidad de relajarse y en cierto modo salir de la rutina del trabajo, la familia y demás aspectos de la vida cotidiana, es importante encontrar actividades que causen felicidad sin necesidad de verlo como una obligación. El realizar ejercicio se presta para conocer nuevas personas y tener un ambiente social más amplio.
Algunas de las prácticas más entretenidas son la danza, el senderismo, el fútbol, el baloncesto y muchas más, en conclusión, es fundamental encontrar una rutina que en realidad genere satisfacción.
Mejora significativamente el estado de ánimo
Es uno de los estímulos emocionales más interesantes y es que tras realizar actividad física el cerebro percibe una sensación de satisfacción y salud, liberando endorfina en todo el cuerpo, un químico que provoca la sensación de felicidad y relajación en las personas, incluso ayudando a reducir la ansiedad. Al ejecutar ejercicio regularmente es posible sentirse mejor frente al aspecto físico, mejorando de manera positiva la confianza y autoestima.
Hay muchas maneras de mejorar el estado de ánimo, tales como ver películas, jugar algún videojuego, salir con amigos, practicar algún deporte o contratar alguna chica para una videollamada erótica; aunque parezca complicado al principio, tomarle cariño al ejercicio es un hábito excelente, ya que aporta un mejoramiento en el estado físico y mental.
En conclusión la actividad física es una maravillosa forma de mejorar el ánimo y la salud, según los expertos se recomienda hacer actividad aeróbica moderada por 150 minutos o intensa de 75 minutos a la semana, esto incluye caminar, nadar, andar en bicicleta, correr, practicar bailes aeróbicos y trabajos pesados. Si el objetivo es la pérdida de peso o su mantenimiento, se recomienda dedicar más de 300 minutos a la semana, además de estar activos por cortos periodos de tiempo durante el día ayudan a contribuir en los beneficios para la salud.