El estadio Maracaná enfrentará esta tarde a dos equipos bien diferentes. Con necesidades y obligaciones distintas además. Bélgica tiene al alcance de la mano su pase para los octavos de final del Mundial. Claro, siempre y cuando le gane en Río de Janeiro a la Rusia de Fabio Capello, que a su vez intentará recuperar el terreno perdido tras su corto empate 1-1 ante Corea del Sur en su debut en el torneo.
Rusia encara con marcada urgencia el duelo ante la prometedora Bélgica, que hasta ahora no mostró lo que en la previa prometía y que sueña con hacer historia en Brasil de la mano de sus jóvenes jugadores, que además 20 de los 23 miembros del plantel militan en el exterior: 11 en la Premier League inglesa como Eden Hazard (Chelsea) y Romelu Lukaku (Everton).
En tanto, los 23 nombres que eligió Capello para este torneo actúan en la liga doméstica. Pese a los intentos de renovación del DT italiano para el Mundial en casa en 2018, el equipo es uno de los más veteranos y tiene experiencia en el campo internacional, aunque sin éxito por cierto. “Estos son los jugadores con los que puedo trabajar”, dijo el seleccionador resignado al ver también que las promesas no tienen cabida en sus clubes porque están copados por estrellas extranjeros.
Con respecto al desafío de hoy, la realidad marca que una derrota de Rusia también la dejaría herida de muerte y supondría la clasificación a la siguiente fase de una Bélgica que, a diferencia de su rival, es favorita para llegar lejos en esta competencia, que viene mostrando algunas sorpresas.
Tal es así que inclusive Marouane Fellaini, volante que integra las filas de Manchester United y fue autor del gol del empate ante Argelia, dijo en la previa con mucha convicción y sin ponerse colorado que “Bélgica es capaz de ganar el Mundial”. Claro, habrá que ver cómo salen hoy y luego cómo en la siguiente fase.
FG_AUTHORS: La Capital – Ovación