El Ingeniero había sufrido un ACV. Allegados dicen que fue por la tensión tras la embestida de Makler contra la empresa.
El Ingeniero Enrique Lauria, titular de la empresa IDM ubicada en el acceso norte de la ciudad de San Lorenzo, falleció el viernes 11 de Mayo por la mañana. Unos días antes se había descompensado sufriendo un ACV.
El deceso del histórico empresario local se da en medio de una crisis de su empresa, que se encuentra paralizada luego de una decisión del Gobierno Provincial.
La Secretaria de Medio Ambiente (Makler) dejó sin habilitación a la empresa para llevar adelante un proceso llamado «vitrificación» por el cual se encapsulan las cenizas resultantes de la incineración.
Los especialistas aseguran que esta solución es mucho mejor que la simple «disposición final» enterrándolas en un «relleno de seguridad» y que el problema le explote a las próximas generaciones.
IDM ya tenía el permiso para el procedimiento de vitrificación. Pero aparecieron hace unos meses algunas opiniones en contra que permitieron al Secretario de Medio Ambiente (César Makler) volver a la carga contra la empresa con recursos legales. Es conocido que el funcionario mantenía una antigua disputa personal con Lauría desde su época de facultad.
La disputa personal resurgió en 2010 cuando Makler apoyó el proyecto de relleno de seguridad en Puerto General San Martín en contra de todo sentido común (muy cerca de las viviendas) y contra las resoluciones internacionales sobre dónde deben estar emplazados.
Mientras tanto Lauría explicaba públicamente cómo los rellenos de seguridad (donde los residuos peligrosos se entierran directamente o con mínimo tratamiento), son un problema muy serio porque todo depende de que no haya fisuras, filtraciones, y esto es imposible de garantizar después de una cantidad de años. Por eso desarrolló la vitrificación, que permite encapsular las cenizas y ese vidrio a su vez puede ser utilizado en algunos tipos de construcciones de rutas donde han demostrado eficiencia.
Pero además da lugar a la mayor corrupción: Las empresas priorizan la rentabilidad, se quieren ahorrar el gasto de tratar sus residuos, y comienzan a mandar al «relleno de seguridad» sus residuos peligrosos sin el tratamiento previo. Obviamente esto requiere que los funcionarios miren para otro lado flexibilizando los controles.
IDM queda muy afectada por la desaparición de su fundador y sobre todo por la prohibición de la vitrificación. Son 200 puestos de trabajo directo los que están en peligro.