Carta de lectores: Se ha dejado sin efecto todo lo actuado contra La Asociación Odontológica de Rosario sobre un fallo judicial COMUNICADO:
Se informa a la comunidad odontológica de la ciudad de Rosario y alrededores, que con fecha 14 de mayo del corriente año, la señora jueza de 1ra. Inst. Distrito Civil y Comercial Nº 13 de Rosario, Dra. Marta Gurdulich, ha dictaminado lo siguiente con respecto a los odontólogos: Tripaldi Ana María, Piccone Silvia Elena, de la Cruz, Mónica María, Kholi Alicia N. y Arroniz Juan José-
Dejar sin efecto todo lo actuado en su contra en la Asociación Odontológica de Rosario, como así mismo las suspensiones de las que fueran objeto en una asamblea que fue declarada nula con muchas antelación por este juzgado; por carecer de todo sustento institucional y violar claramente los derechos de defensión de los acusados. Así mismo menciona que los Directivos de la Comisión de Asor, con su accionar han procedido al margen de la legalidad, según lo manifiesta la señora jueza en dictamen.
Estos “señores directivos” han utilizado un procedimiento de persecución y presión moral y psicológica; al mejor estilo de la dictadura militar.
Toda la campaña difamadora, que sobre estas profesionales han realizado los Directivos en los distintos ámbitos como ser, UNR, Colegio de Odontólogos, la UNR, Ateneo, Cora y otras esferas relacionadas con la profesión y paradójicamente, hasta con los vigiladotes del Asor; no podrán ser borradas jamás con esta justa determinación judicial.
La conducta y la ética demostrada por estos directivos, algunos docentes y formadores de los futuros odontólogos de Rosario, tras las acusaciones sin pruebas y la calumnia con el boca a boca; han causado un perjuicio incalculable a la moral de estas profesionales con una trayectoria de más de 30 años en algunos casos. Estos seudos inquisidores, amparados en su poder temporal que les da una institución, solo han demostrado ser gente de baja estofa; engañando al estudiantado y a todo profesional incauto que creyó en sus viles ardides.
Hoy, como lo harán mañana, deberán enfrentar los efectos y los gastos que generaron sus procedimientos persecutorios y falsarios que siguieron durante casi dos años; con el envío de cientos de cartas documentos malgastando el dinero de los asociados para cubrir estúpidos desatinos personales.
Pero desgraciadamente, aún con esta sentencia “favorable y justa”, no habrá desagravio que pueda reparar el daño moral hecho por estos mal llamados “profesionales”; con ambiciones de poder desmedidas.
Od. Mónica M. de la Cruz – Matricula 1793