Chicos y maestros saldrán a la calle a pedir por seguridad. Las escuelas rosarinas, públicas y privadas, realizarán entre el 23 y 27 próximos una jornada en contra de la violencia y a favor de la convivencia ciudadana. La idea es que alumnos y docentes produzcan afiches, carteles y dibujos referidos a la paz social, y luego los repartan en sus barrios. Incluso las escuelas del centro pondrán mesas en la peatonal Córdoba para distribuir volantes sobre la problemática.
Escoltado por autoridades del Ministerio de Educación, de la Defensoría del Pueblo y de la Municipalidad, el delegado local del Ministerio de Gobierno, Guillermo Pidone, encabezó ayer la cuarta reunión con directivos y supervisores escolares (alrededor de 50), en la que se definió los lineamientos generales de la campaña En principio, el problema que convocó a autoridades y docentes fue el de la inseguridad en las escuelas, ya que sufren distintas instituciones educativas vienen sufriendo, en forma sistemática, robos, asaltos y hurtos.
Pero más allá de los refuerzos policiales en algunas zonas claves, las autoridades llegaron a la conclusión de que el ámbito educativo es uno de los mejores lugares para hacer docencia sobre la convivencia y en contra de la violencia, como prevención del delito.
«Es una política de Estado velar por la seguridad comunitaria y para eso comenzaremos con toda la comunidad educativa que abarque a los maestros, alumnos, padres y el conjunto de los vecinos de cada institución», reflexionó Pidone.
Por iniciativa de la comunidad educativa se decidió que durante la jornada se repartan afiches y carteles en los almacenes, quioscos y supermercados, entre otros lugares. Y los docentes ensayaron algunas consignas para utilizar en la campaña: «Vivir es convivir», «¿Por qué no nos respetamos a nosotros mismos?» y «Seamos solidarios», entre otras.
A lo largo del encuentro, llevado a cabo en la ex Jefatura, quedaron expuestas distintas visiones de la problemática de la violencia y de la inseguridad, del mismo modo que las posibles soluciones. Así fueron muchos los docentes que hicieron hincapié en las responsabilidad de las familias y del contexto social, en especial de los medios de comunicación.
Según consideraron algunos docentes, el mensaje sistemático de la televisión atenta contra los chicos que durante horas ven programas que incitan a la violencia. Como ejemplo de estos efectos dieron cuenta de las peleas en las que los chicos se embarcan en los recreos.
Pero hubo otro sector que llamó a reflexionar sobre la responsabilidad de la propia escuela en relación a la contención de los niños. Sin embargo, más allá de las diferencias de criterios todos acordaron realizar una semana de reflexión contra la violencia.