Se logró luego de las gestiones realizadas por el presidente de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), Alfredo González.
Las hizo ante la Secretaria de Energía de la Nación, Flavia Royón. Lo que se consiguió es una baja en la tarifa eléctrica para productores frutícolas, vitivinícolas, hortícolas, forrajeros y frigoríficos vinculados a la producción agrícola, que hayan sido afectados por inclemencias climáticas en la provincia de Neuquén.
Alfredo González junto a Flavia Royón
Para los regantes agrícolas, la Resolución 830/2023 de la Secretaría representa una considerable baja en los costos de energía, en resguardo de la rentabilidad y continuidad productiva de las explotaciones damnificadas.
En el caso de aquellos que poseen un consumo superior a 10 kilowatts (kW), por ejemplo, la tarifa se redujo en más de un 80% por cada kW consumido hasta marzo de 2024.
CAME celebra esta medida en defensa de los productores agropecuarios neuquinos, pero también solicita federalizar el beneficio a todo este sector de la economía que genera arraigo y mano de obra, además de garantizar la mesa diaria de los argentinos.
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