Mauro Zárate habló con Indirecto, TyC Sports, y allí detalló cómo está viviendo las horas previas al debut en el torneo local, donde se presentará nuevamente con la camiseta de Vélez, tras varios años en el extranjero y después de haber resuelto el conflicto con la Lazio, mediante la habilitación de la FIFA. El debut será el lunes a las 18 ante All Boys, como visitante.
«Fue un mes en el que todos los días preguntaba cuándo iba a jugar, ya sea a mi hermano como así también a los abogados. Me dijeron ayer que podía hacerlo y fue algo muy bueno, ya que lo esperé mucho tiempo», expresó Zárate, quien también se refirió a su condición actual. «Por suerte en lo físico estoy bien y los encuentros que tuve me sirvieron para agarrar ritmo, pero necesito jugar», sostuvo el atacante.
«Decidí irme de la Lazio y resignar todo para jugar», expresó Zárate, quien se fue en conflicto con el club italiano, tanto con la dirigencia como con la hinchada. No obstante, esto lo hizo ser más maduro y reflexivo en sus pensamientos, en relación al que se fue hace más de cinco años. «La verdad es que fui madurando a los golpes, porque los consejos de mis hermanos me entraban por un lado y me salían por el otro», afirmó el hermano de Ariel, Sergio y Rolando, quienes son sus otros familiares jugadores.
Luego, el hábil jugador no esquivó el tema de su individualismo y afirmó: «Un poco sigue el ‘morfón’, pero la gambeta en el área sirve, aunque también aprendí que a veces es necesario jugar en equipo. En Europa me di cuenta de dónde tengo que estar para hacer la diferencia, porque antes me iba a lugares en el que no tenía gravitación, con el agregado de que siempre tenía ansiedad de querer tener la pelota en los pies, gambetear y hacer la diferencia. Yo pensaba que así ayudaba al equipo, pero comprendí que se puede hacer de otras maneras y estando cerca del gol».
Por último, el atacante opinó acerca del fútbol actual. «Me parece que no cambió mucho, sigue siendo de roce y rápido, pero con el detalle de que jugando por abajo uno tiene más chances de poder hacer la diferencia. No obstante, con la velocidad también aumenta la fricción y pienso que por lo poco que he visto, sacando los juegos que veía de Vélez, se está pegando demasiado», expresó Zárate, quien puso de ejemplo a Ricardo Centurión, el talentoso jugador de Racing. «Cada vez que intenta un amague le pegan y se hace difícil. El único era Neymar en Brasil, pero cuando lo intentó en Europa le empezaron a pegar», cerró otro de los jugadores desequilibrantes que tendrá el campeonato.
Authors: Yahoo Argentina Deportes