Tras observar que el delantero uruguayo Luis Suárez había mordido en dos ocasiones a sus rivales, el noruego Thomas Syversen se jugó y decidió invertir 32 coronas (cerca de 4 euros) en una apuesta muy singular: Suárez tendría que morder a un contrario en el transcurso del Uruguay-Italia.
Con una probabilidad de 175 a 1, este joven logró cobrar un boleto por valor de 5.600 coronas (aproximadamente 675 euros) después de que Chiellini mostrase a todo el planeta la sorpresiva marca de su hombro.
En declaraciones al periódico noruego "Aftenposten", Syversen reconoció que era la jugada mas loca que había cometido: "Yo sólo pensé voy a apostar que muerde y así lo hizo. Fue divertido".
"Me quedé dormido viendo el partido y desperté justo antes de que ocurriera, así que no estaba muy lúcido. Vi el episodio en las repeticiones y resultó muy especial. Pero para mí fue todo un éxito", contó el apostador.
Tras el episodio, la Fifa abrió un procedimiento disciplinario que podría acarrearle una severa sanción, lo que pone en serio riesgo su participación en los octavos de final frente a Colombia.
FG_AUTHORS: La Capital – Ovación