“Estamos orgullosos de vivir en la tierra que fue escenario del origen de la gesta emancipadora para medio continente», expresó el intendente Leonardo Raimundo, en el Campo de la GloriaCon un acto que se llevó a cabo en el Campo de la Gloria, la Municipalidad de San Lorenzo le rindió ayer tributo al general José de San Martín, al cumplirse este martes el 171° aniversario de su fallecimiento.
La ceremonia fue encabezada por el intendente Leonardo Raimundo y acompañada de otras autoridades y referentes de instituciones intermedias varias.
La actividad comenzó con la presentación de las tropas y la entonación del himno nacional, a cargo del cantante sanlorencino Pablo Parente.
Luego se realizó el arrío de la bandera nacional a media asta, se colocó una corona de laureles al pie de la llama votiva y se efectuó un minuto de silencio. A continuación, el párroco Fernando Pereyra efectuó una oración y el intendente y el presidente del Concejo Municipal, Gustavo Oggero, entregaron placas de reconocimiento de servicio a los granaderos retirados Elías Miño, Diego Zabala, Elio González, Gustavo Luna y Esteban Lacuadra.
“Todos los países tienen un héroe fundador, pero no hay muchos en el mundo que hayan producido la liberación de países hermanos, una gesta emancipadora compartida, solidaria. Gracias a San Martín exportamos ese sentimiento de dignidad y el compromiso de construir países dignos de ser vividos”, añadió.
“No vamos a hablar hoy del Combate de San Lorenzo y la epopeya del Cruce de los Andes, pero sí podemos hablar del temple que le puso a la revolución en un momento difícil 1813. Un juego de pinzas estaba ahogando el ímpetu libertario en un país que no tenía absolutamente nada. Sin recursos y con hombres y mujeres comunes enfrentó a uno de los ejércitos más poderosos de la tierra y enfrentó la pobreza, el analfabetismo y la desunión que había en el país”, amplió sobre el primer punto.
“Otro ejemplo es su fallecimiento. Falleció en el exilio porque nunca quiso participar de los ánimos divisionistas que campeaban en la Argentina y prefirió morir solo lejos de su patria”, profundizó.
En ese sentido, ya de cara al presente, Raimundo planteó que “siempre debe haber disenso, porque eso fortalece el sistema democrático, pero las diferencias nunca deben transformarse en lacerantes heridas que inmovilicen al país”. “Todos los argentinos debemos estar orgullosos del Padre de la Patria y la forma más patente de transmitir ese orgullo es trabajando para hacer realidad esos ideales de libertad, independencia y progreso social para todos”, concluyó.