Foto de portada: Distintos patrones de calor durante le estudio.
Determinar la salud de un paciente siempre ha acarreado una serie de estudios y exámenes médicos que nos puede resultar hasta tediosos. Sin embargo, un nuevo estudio realizado por científicos de China, reveló que a través de los patrones de calor del rostro, es posible determinar que tan bien está envejeciendo una persona y si es propenso a desarrollar ciertas enfermedades.
Detectar patrones de calor en el rostro con termografía facial
Los expertos desarrollaron una herramienta con la que comparan los patrones de calor que emite la nariz, las mejillas y la zona de los ojos, siendo ideal para el control y detección de un envejecimiento saludable en las personas.
Se trata de un programa de Inteligencia Artificial entrenado con los datos de 2.811 participantes de 21 años a 88 años. La IA identificó varios patrones térmicos faciales que podrían indicar el reloj biológico de una persona.
Los patrones de calor son detectados a través de cámaras infrarrojas con la que capturan los patrones de calor. La herramienta tuvo una excelente recepción entre los pares, ya que se trataría de la primera herramienta de este tipo, capaz de revelar información valiosa sobre la salud metabólica y el envejecimiento biológico de una persona.
Patrones de salud y el envejecimiento
El estudio realizado por los investigadores chinos identificó que la temperatura de diferentes áreas del rostro cambia con la edad de una manera predecible. La temperatura de la nariz, por ejemplo, disminuye más rápidamente con la edad en comparación con otras regiones de la cara, mientras que la temperatura alrededor de los ojos tiende a aumentar.
Este descubrimiento sugiere que las personas con narices más cálidas y áreas más frías alrededor de los ojos podrían tener un reloj térmico facial que avanza más lentamente.
Además, el perfil térmico de un individuo está vinculado a ciertos factores de estilo de vida y condiciones de salud metabólica. Las personas con diabetes mostraron un perfil térmico facial que aparentaba ser seis años mayor que el de sus pares sanos de la misma edad. Este hallazgo indica que los patrones térmicos faciales pueden ser un indicador precoz de enfermedades metabólicas.
El estudio también reveló que aquellos con un trastorno metabólico tenían más probabilidades de mostrar temperaturas más altas en el área de los ojos que sus contrapartes sanas, de la misma edad y sexo.
Además, los participantes con presión arterial elevada mostraron temperaturas más altas en el área de los ojos y las mejillas. Los hombres con hipertensión generalmente tenían narices relativamente más frías.
«El reloj térmico está tan fuertemente asociado con las enfermedades metabólicas que los modelos de imágenes faciales anteriores no podían predecir estas condiciones».
Declaró Jing-Dong Jackie Han de la Universidad de Pekín en China.
¿Qué precisión tiene la termografía facial para predecir trastornos metabólicos?
El estudio reveló que la termografía facial no solo permite la evaluación del envejecimiento biológico, sino que también puede predecir trastornos metabólicos con una precisión notable. El modelo de inteligencia artificial desarrollado por los investigadores puede predecir condiciones como la diabetes y la enfermedad del hígado graso con más del 80% de precisión. Este nivel de precisión es comparable a los métodos de diagnóstico tradicionales, pero con la ventaja adicional de ser no invasivo y rápido.
Los participantes con presión arterial elevada, por ejemplo, mostraron temperaturas más altas en el área de los ojos y las mejillas. En contraste, los hombres con hipertensión generalmente tenían narices relativamente más frías.
Un aumento en la temperatura alrededor de los ojos y las mejillas también se relacionó con una mayor actividad celular vinculada a la inflamación, proporcionando más datos que pueden ayudar en el diagnóstico y la intervención temprana de enfermedades.
Comparación con Métodos Tradicionales
Comparada con los métodos tradicionales para diagnosticar trastornos metabólicos y varias enfermedades, la termografía facial ofrece varias ventajas significativas. Los métodos tradicionales a menudo son invasivos, requieren tiempo y pueden no siempre capturar cambios tempranos en la salud metabólica. En cambio, la termografía facial proporciona una evaluación rápida y no invasiva, capturando patrones térmicos distintivos que reflejan el estado de salud metabólica y el envejecimiento biológico.
En un estudio pequeño, se descubrió que tan solo dos semanas de ejercicio diario, como saltar la cuerda, podían reducir la «edad» térmica facial de una persona en un promedio de cinco años. Este hallazgo no solo demuestra el potencial de conocer los patrones de calor como herramienta de diagnóstico, sino también como una forma de biorretroalimentación que podría motivar a las personas a adoptar hábitos de vida más saludables.
Los investigadores están totalmente seguros que la herramienta de detección de patrones de calor tiene un potencial importantísimo para diagnosticar e intervenir a tiempo ciertas enfermedades. Un invento crucial en la promoción de un envejecimiento saludable y la prevención de enfermedades crónicas.
El estudio fue publicado en la revista Cell Metabolism.
Fuente: CerebroDigital.net