Mijaíl Gorbachov, el último secretario general comunista de la Unión Soviética, hizo un llamado por una nueva “revolución” Americana -también refiriéndose a ella como una “perestroika,” o reestructuración gubernamental- en una editorial publicada el miércoles en el periódico The Sydney Morning Herald
Pressenza. Sidney, 2009-06-15. por Pía Figueroa
“Algunos han reaccionado en forma comprensiva. Otros han objetado, incluso sarcásticamente, sugiriendo que quiero que Estados Unidos experimente una conmoción, como sucedió en la antigua Unión Soviética. En mi país han habido reacciones particularmente cáusticas por parte de los opositores de la perestroika, personas con memorias cortas y un déficit de conciencia”, escribió el antiguo líder Soviético.
Continuó expresando: “Nuestra perestroika señaló la necesidad de cambio en la Unión Soviética, pero no quise sugerir la capitulación del modelo Norteamericano. Hoy en día, la necesidad de una perestroika de más largo alcance – para América y el mundo – se ha hecho cada vez más clara”.
En Rusia, la “perestroika” de Gorbachov consistió en una reestructuración gubernamental y la introducción al modelo Comunista de libertades económicas de mercado limitadas, lo que inicialmente causó una gran desazón social antes de convertirse eventualmente en una parte integral de la sociedad.
Gorbachov hizo un llamado similar en Noviembre, cuando entonces declaró al Presidente elegido de los E.E.U.U. Barack Obama “un hombre de estos tiempos” y sugirió que su administración tendría que llevar a cabo una “perestroika” Americana.
“El es capaz de restablecer el diálogo, sobretodo considerando que las circunstancias le permitirán salir de una situación sin salida”, dijo Gorbachov, de acuerdo al servicio noticioso Ruso RIA Novosti. “Barack Obama no ha tenido una carrera muy larga, pero se hace difícil encontrarle defectos y ha liderado una campaña electoral en que ha vencido al Partido Demócrata y a la misma Hilary Clinton. Podemos recabar de esto que esta persona es capaz de emprender el diálogo y comprender las realidades actuales”.
El Comunista Ruso, en sus últimos párrafos, hace un balance sorpresivo entre la libertad capitalista y los controles del gobierno.
“Si todas las soluciones y acciones propuestas ahora se convierten en un mero reposicionamiento del sistema antiguo, seguramente veremos otra, quizás aún mayor, sacudida social a lo largo del camino”, escribió.“El modelo actual no necesita ser ajustado sino reemplazado. No tengo ninguna receta hecha a la medida, pero estoy convencido de que un nuevo modelo surgirá, un modelo que enfatice las necesidades públicas y el bien público, tales como un medio ambiente más limpio, infraestructuras y transporte con un buen funcionamiento, educación y salud en buenas condiciones y viviendas asequibles”.
Y continuó diciendo: “Ha llegado el momento de hacer un balance correcto entre el gobierno y el mercado, para integrar los factores sociales y medio ambientales y desmilitarizar la economía”.
Finalmente, Gorbachov advierte que el modelo económico mundial actual, creado por la “élite Americana”, se está resquebrajando. A medida que se vaya colapsando, muchos sufrirán, predijo. Incluyendo a los Estados Unidos”.
Gorbachov concluye: “Por más grandes que sean las diferencias entre los problemas a los que se enfrentó la Unión Soviética durante nuestra perestroika y los desafíos a los que se enfrenta ahora Estados Unidos, la necesidad de una nueva forma de pensar hace que estas dos eras sean similares.
En nuestro tiempo, nos enfrentamos principalmente a las tareas de poner fin a la división del mundo, parar la carrera armamentista nuclear y apaciguar los conflictos. Sobrellevaremos los nuevos desafíos globales también, pero solo si todos comprendemos la necesidad de un cambio real, fundamental, de una perestroika global”.