Tres exaltos directivos están acusados de causar la quiebra del Anglo Irish Bank, que obligó al Gobierno de Dublín a pedir el rescate
Tres altos directivos del Anglo Irish Bank acusados de fraude comparecieron ante un tribunal de Dublín, un juicio histórico que pone cara a los presuntos culpables de la crisis que afecta a los irlandeses desde 2008 originada por la burbuja inmobiliaria.
Fotografía de archivo tomada el 1 de noviembre de 2013 que muestra al ex-presidente del Anglo Irish Bank. Sean Fitzpatrick, a su salida de los juzgados en Dublín (Irlanda). EFE
El exdirector ejecutivo Sean FitzPatrick y otros dos altos cargos de esa entidad son los primeros banqueros de renombre que se sientan en el banquillo en Irlanda; un hecho que puede convertirse en un precedente para similares casos en otros países.
El colapso del banco llevó a Irlanda a pedir el rescate
El colapso del Anglo Irish Bank llevó al Gobierno a nacionalizarlo en 2009 y a invertir más de 30.000 millones de euros en su rescate. Un año después, ahogado por la deuda, Irlanda pidió un rescate a la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional por 85.000 millones de euros, que abandonó con éxito en diciembre pasado.
Revalorizaron el banco de manera fraudulenta
FitzPatrick, el exdirector de finanzas William McAteer y el exdirector general de préstamos Patrick Whelan se han declarado inocentes de los 16 cargos presentados contra cada uno por la “prestación ilegal de asistencia financiera”, por un total de 451 millones de euros, a “16 individuos” en julio de 2008 con el fin de revalorizar de manera fraudulenta las acciones del banco. Ese delito está penado en Irlanda con un máximo de cinco años de cárcel y una multa que se situaría en un mínimo de 3.100 euros.
Gran expectación en Irlanda con este caso
Los tres exaltos directivos volvieron a declararse inocentes al inicio de un proceso que el abogado del Estado, Paul O’Higgins, calificó de único en la historia de Irlanda por la composición del jurado. El juicio ha generado tanto interés que las autoridades han habilitado otra sala en el complejo judicial de la capital irlandesa para que se pueda seguir el proceso a través de pantallas de televisión. Unos 800 testigos, entre ellos 42 policías, y más de 24 millones de documentos serán presentados a un jurado compuesto por doce personas, al que se añade, por primera vez, a otras tres para que el proceso no se venga abajo en caso de que enfermen más de dos miembros, en un juicio que durará entre cuatro y seis meses.
Los préstamos durante el boom inmobiliario
En su presentación, el abogado del Estado indicó al jurado que se tratará de esclarecer qué pasó con las “acciones o parte de las acciones” del Anglo en 2008 y enumeró ciertos aspectos contenidos en la Ley de Empresas irlandesa (2012) que son relevantes para la instrucción. “Las compañías son estructuras que pueden generar un gran beneficio y, otras veces, daños considerables. Es vital que las acciones de una compañía sean tratadas de la manera adecuada, y, si no es así, se podría incurrir en un delito”, señaló el abogado.
En referencia al Anglo, recordó, se ofrecieron “préstamos en circunstancias muy extraordinarias, que no tenían nada que ver con sus negocios ordinarios, lo cual es muy importante para este caso”.
Durante el “boom” de la construcción en Irlanda, el Anglo Irish Bank se convirtió en el prestamista preferido de ese sector por su facilidad para conceder créditos de alto riesgo, lo que generó deudas multimillonarias cuando estalló la burbuja en 2008.
El préstamo de 451 millones que hundio al banco
FiztPatrick, McAteer y Whelan llegaron a prestar de manera supuestamente fraudulenta 451 millones de euros a esos 16 individuos, miembros de un grupo conocido como “Maple 10″, para comprar acciones del banco. Entre los integrantes del “Maple 10″ figuran seis miembros de la familia de Sean Quinn, el que fuera en hombre más rico de Irlanda y a quien el Anglo reclama una deuda de casi 3.000 millones de euros, a pesar de que el exmillonario se ha declarado en bancarrota.
Como parte de la reestructuración del sistema bancario irlandés, el Gobierno irlandés fusionó en 2011 el Anglo Irish Bank y el Irish Nationwide, y ambos fueron cerrados definitivamente el pasado año a través de una entidad llamada Irish Bank Resolution Corporation.
ELPLURAL.COM