Por Luis Rojas, Jiang Biao y Xi Yue
TEGUCIGALPA, 16 jun (Xinhua) — La llegada a la Presidencia de Honduras de Xiomara Castro en enero de 2022 y el posterior establecimiento de relaciones diplomáticas con China en marzo de 2023, pusieron fin al ciclo de «República bananera» que por décadas se adjudicó al país centroamericano, consideró el sociólogo hondureño, Allan Fajardo.
En entrevista con Xinhua, el académico de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) calificó de «nefasto» el papel que desempeñaron en la nación las empresas estadounidenses bananeras como United Fruit Company y Standard Fruit Company, hasta la huelga generalizada ocurrida en 1954.
«Se puede decir que la huelga del 54 fue el principio del fin de la ‘Banana Republic'», expuso el experto respecto al término atribuido al humorista y escritor estadounidense conocido con el sobrenombre de «O. Henry».
«Y la elección de Xiomara Castro y la apertura de relaciones con China cierra el ciclo donde termina por fin la ‘Banana Republic'», añadió.
La histórica huelga de 1954 en Honduras de los campos bananeros se generalizó entre los trabajadores del país centroamericano e incluso tuvo la solidaridad de algunos empresarios, ante las demandas de mejoras salariales y laborales en general, según ilustró Fajardo.
La idea también fue poner fin a la era de «neocolonialismo» y del modelo de «enclave bananero» que de alguna manera impusieron las transnacionales y dar prioridad al libre comercio en la empobrecida nación centroamericana que Estados Unidos aplicaba de forma caprichosa.
«Defienden el libre comercio cuando les conviene y cuando se sienten débiles entonces no», apuntó el entrevistado.
«Eso sucedió ahí, que los empresarios nacionales aprovecharon la huelga para apoyarla, solidarizarse y lograr que una de las reivindicaciones de los trabajadores fuera que hubiera libre comercio en todas las zonas bananeras, y eso se logró», agregó.
El sociólogo expuso que el modelo económico que imperaba, influenciado por Estados Unidos, llevó a Honduras a enfrentar condiciones generales de subdesarrollo, dependencia, pobreza y mortalidad infantil, en niveles muy superiores a los que prevalecían en el continente americano.
Ya en la época actual, el establecimiento de relaciones diplomáticas entre Honduras y China, el 26 de marzo de 2023, representó en principio para el país centroamericano la posibilidad de ampliar su base exportadora.
«En las primeras semanas de la apertura de la relación con China comenzó a haber exportación de melón, de algunas hortalizas. Se comenzó a negociar café y algunos otros productos», dijo Fajardo, además de que «hay conversaciones para inversiones chinas acá en Honduras», es decir, «una ampliación aún mayor de los mercados».
«Ahora con el establecimiento de relaciones diplomáticas se abre un camino para un aumento de las exportaciones de Honduras hacia China», añadió.
Con el reconocimiento que hubo desde el principio de una sola China, se abrieron oportunidades no solo comerciales sino también en materia de inversión, asesoría urbanística y proyectos para dar un valor agregado a las materias primas de la nación centroamericana.
Honduras, por ejemplo, exporta hierro y zinc, así que China podría invertir en esos materiales para su proceso y transformación.
«Si nosotros pudiéramos trabajar nuestras pequeñas exportaciones de hierro y de zinc en productos terminados como varillas de hierro y láminas de zinc, nosotros podríamos demostrar cómo es que China no solo viene con estos recursos naturales, también nos está apoyando para nuestro propio desarrollo industrial», explicó el experto.
Otro de los puntos de cooperación se encuentra en la asesoría para el desarrollo urbano de Honduras, ante las grandes necesidades de infraestructura.
«Y hay muchas esperanzas en eso, en asesoría, en el desarrollo comercial, aumento de las exportaciones, agregación de valor a materias primas. Se abren muchas esperanzas de lo que se puede hacer con China», añadió el académico de la UNAH.
Tras poco más de un año del establecimiento de relaciones diplomáticas entre Honduras y China, Fajardo refirió que el balance ha sido como pasar del «infierno al cielo» y también se perfila un futuro «luminoso» entre los dos pueblos que se respetan.
«Aun cuando haya diferencias económicas en su desarrollo, nos tratamos como iguales y nos tratamos como actores dignos. Ambos nos consideramos iguales en derechos y eso no se daba antes», comentó.
«Por eso digo que la apertura de relaciones con China y el triunfo electoral de Xiomara Castro son la etapa que termina el proceso en que Honduras termina de ser una ‘Banana Republic’ y comienza a ser plenamente lo que dice nuestro escudo nacional: libre, soberana e independiente», concluyó el entrevistado.