La cifra, medida en toneladas, corresponde al primer cuatrimestre del año y representa a todos los productos lácteos.
Se destaca una baja importante en las leches no refrigeradas, de casi el 25%; así como también productos de alto valor agregado como chocolatadas, postres, yogures y flanes.
La crisis económica, sumada a una alta inflación y la importante suba de los lácteos sucedida durante los últimos meses, llevó a que se produzca una merma muy pronunciada en el consumo interno de lácteos, evidenciada claramente en uno de los productos de más alta demanda, como la leche fluida entera (denominada UAT, con envase de cartón), la cual retrocedió en el primer cuatrimestre del año en un 24.8% respecto a enero-abril de 2018.
En este escenario de menor consumo de lácteos en general que evidenció el Observatorio de la Cadena Láctea -OCLA-, tomando datos Panel de Industrias Lácteas, también las leches chocolatadas, postres, manteca, yogures y flanes, fueron productos que sintieron el impacto de la menor demanda. (*ver cuadro*).
Desde el OCLA expresaron también que “es notable la reducción en el consumo de primeras marcas y su sustitución por segundas, terceras y marcas blancas”.