
Canadá quería medir la vida del océano. Su robot descubrió que los mares están respirando más fuerte… y eso, irónicamente, no es una buena señal
Canadá quería medir la vida del océano. Su robot descubrió que los mares están respirando más fuerte… y eso, irónicamente, no es una buena señal
El estudio del programa BGC-Argo, publicado en PNAS, reveló un crecimiento anómalo del fitoplancton: millones de toneladas que podrían alterar la química del mar. Lo que debía confirmar la salud del océano terminó exponiendo su desequilibrio más profundo.
Nota original en: GIZMODO




