Por Redacción Chile. Pressenza.com
por Patricio Segura
Este viernes 11 de abril termina el plazo para realizar observaciones al documento.
- Este año corresponde revisar los compromisos de Chile en materia de adaptación y mitigación del cambio climático, en el instrumento Contribución Determinada a Nivel Nacional (NDC, por su sigla en inglés).
- Sin embargo, al igual que en la actualización de 2021 del gobierno de Sebastián Piñera, Chile decide no incluir la protección a los glaciares, masas de hielo fundamentales para la seguridad hídrica en la zona central, donde vive la mayoría de la población.
- Tampoco incorpora metas más ambiciosas en materia de energías renovables, aunque en la COP 28 de hace 2 años, se acordó triplicar la generación renovable y limpia.
Este viernes 11 de abril vence el plazo para que las personas naturales y jurídicas del país realicen sus observaciones al “Anteproyecto de Actualización de la Contribución Determinada a Nivel Nacional 2025 (NDC, por su sigla en inglés)” del gobierno de Gabriel Boric. Es este el instrumento marco en el cual los gobiernos plasman sus compromisos en materia de cambio climático para los cinco años siguientes.
Las NDC fueron instituidas en el Acuerdo de París en 2015, presentando Chile su primera versión tentativa ese mismo año, la que se actualizó en 2020. Hoy corresponde una nueva actualización.
Esta es una oportunidad para incorporar aspectos que en la última actualización no tuvieron mayor relevancia o que de plano quedaron fuera.
Ya en 2020 cuando se presentó la primera de las NDC oficiales, se cuestionó que el documento no hiciera alusión alguna a la protección de los glaciares . Y no sólo eso, en sus más de 50 páginas el concepto (al igual que la nieve y el hielo) no apareció mencionado. Esto, a pesar de ser estas masas de hielo fundamentales como indicadores climáticos, reguladores de la temperatura local y fuente hídrica esencial en la zona central, donde vive la mayoría de la población.
Esto, en contra de las recomendaciones de la Mesa del Agua que se constituyó al alero del Comité Científico de Cambio Climático al que convocó el gobierno de la época. En dichas recomendaciones se señala que es fundamental en Chile “integrar el componente ambiental al derecho y la gestión de las aguas mediante la aprobación de normas protectoras de glaciares y turberas”. Ello está contenido en el documento Evidencia científica y cambio climático en Chile: Resumen para tomadores de decisiones, elaborado por una red de más de 600 científicos de todas las disciplinas y regiones de Chile, primordialmente de universidades y centros de investigación académica, pero también de institutos públicos y privados.
En el actual anteproyecto de Chile para la NDC 2025 los glaciares sí aparecen. Aunque sólo como contexto de la situación climática, pero no se incluye ninguna medida para su protección.
Por ello, desde la Fundación Chile Sustentable se está planteando la necesidad de incorporar acciones en este sentido.
Ausencia de aumento de ERNC
Insólitamente, el documento tampoco incorpora ninguna actualización sobre la meta de incremento de energías renovables, aunque Chile ya superó con creces el compromiso de generación en base a estas fuentes. Esto está establecido en la Ley N°20.698, que mandata la obligación de un 20% de estas energías al 2025. Con esto, da la espalda al acuerdo incluido en la COP 28 de triplicar la meta de renovables y limpias al año 2030.
En este aspecto, la organización está demandando en sus observaciones al anteproyecto de NDC 2025 que“Chile comprometa una meta de generación de energía en base a ERNC coherente con la Política Energética 2050 y coherente con el proyecto de Ley de Promoción de Energías Renovables actualmente en tramitación, el cual establece una meta de 60% de ERNC para el año 2030. Esto es asimismo coherente con la ambición asumida en la COP 28”.
En la misma línea, relacionado con la descarbonización, Chile Sustentable propone que se incluya “un compromiso referido al aumento gradual del impuesto a las emisiones con la meta de llegar al año 2030 o 2035 a un costo equivalente al costo social del carbono, cuyo monto actualizado por el Ministerio de Desarrollo Social es de $70.540 CLP/Ton CO2 eq (pesos por tonelada de dióxido de carbono equivalente)”.
Se mantiene el fomento de plantaciones exóticas
Otro aspecto negativo del anteproyecto de NDC 2025 es que se mantiene la medida que permite la reforestación con especies exóticas, con el fin de capturar CO2, sin obligar a que constituyan una cobertura forestal permanente, por lo que toda esa masa vegetacional podrá ser deforestada en un ciclo de mediano plazo. Esto puede aumentar las emisiones de CO2 y la erosión de suelos, además de los conflictos por el agua que estas plantaciones traen consigo.
Al respecto, a través de las observaciones ciudadanas Chile Sustentable está demandando que “los compromisos sólo consideren la reforestación con especies nativas y se elimine la posibilidad de reforestación sin cobertura permanente”.
Cuando se inició el gobierno de Gabriel Boric, el Ministerio del Medio Ambiente comprometió ampliar en al menos 1 millón de hectáreas la superficie actual de protección oficial de ecosistemas terrestres y acuáticos continentales al año 2030 y lograr que, a esa fecha, la totalidad de áreas protegidas del Estado tengan sus planes de manejo vigentes, con instrumentos para la adaptación al cambio climático.
Además, incluir la transición socioecológica justa al documento, con el fin de que los costos económicos y sociales de enfrentar la crisis climática no recaigan en los sectores más vulnerables. Sin embargo, sobre este último punto, la NDC 2025 se limita a comprometer que se “implementará la Estrategia Nacional de Transición Socioecológica Justa 2025 – 2035”, la cual a la fecha no compromete un diagnóstico profundo de los pasivos ambientales que han dejado las industrias contaminantes y las termoeléctricas a carbón en las comunas de Tocopilla, Mejillones, Quintero-Puchuncaví, Coronel y Huasco. Por ello, se exige que se incorporen a este instrumento de gestión climática planes de cierre concretos de las unidades aún en operación, así como un Plan de Acción de remediación y reparación de los pasivos ambientales y sociales en las 5 comunas que concentran la operación de centrales termoeléctricas.
Redacción Chile
PRESSENZA – MedioAmbiente 2025
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