Argentina pasó de fase con puntaje ideal, sin embargo todavía debe algunas materias en relación a su producción futbolística en el Mundial. Según lo evidenciado en los primeros tres partidos, el conjunto albiceleste mostró algunos desequilibrios que pueden llegar a ser determinantes en los cruces decisivos. “Entramos en una etapa crucial y hay que buscar equilibrio en la mitad de la cancha. Y en busca de ese equilibrio, quizás nos beneficiaría contar con un mediocampista más”, señaló ayer el defensor Pablo Zabaleta. “No podemos cometer errores a partir de ahora, si te equivocás, te volvés. Ahora los partidos son a vida o muerte”, recalcó el lateral de Manchester City.
Argentina debutó con un cauteloso dibujo 5-3-2, pero tras un pálida actuación, un resonante pedido de Lionel Messi de jugar de manera más agresiva y un reclamo generalizado de la prensa nacional, el entrenador Alejandro Sabella decidió cambiar la estructura al 4-3-3 con el que ganó la eliminatoria sudamericana.
Pero pese al pedido de los delanteros de jugar con un dibujo que dé preponderancia al ataque, Zabaleta dijo que el equipo debe empezar a ser más cuidadoso porque ahora cualquier error se paga directamente con la eliminación, y que la idea de jugar 4-4-2 le parece la mejor.
“Es una etapa decisiva y no hay lugar para los errores”, repitió el temperamental defensor.
Sabella aún no dio pistas sobre el esquema táctico que piensa emplear ante Suiza, en octavos de final, en el Arena Corinthians.
Deberá decidir, entre otras cosas, el nombre del reemplazante del atacante Sergio Agüero, quien sufre una lesión muscular en su pierna izquierda y no estará a disposición.
En otras palabras, si hace ingresar a Ezequiel Lavezzi o a Rodrigo Palacio, manteniendo el esquema 4-3-3, o si apuesta a un 4-2-2 agregando un mediocampista.
“Veremos qué decide Sabella para el partido con Suiza. Tanto el Pocho como Palacio han jugado más por afuera. Tienen más oficio que Agüero para las cuestiones de retroceso, lo han hecho en sus clubes y pueden ser una alternativa“, afirmó Zabaleta.
Así queda claro que dentro del plantel se empezaron a admitir ciertas inconsistencias en el funcionamiento y que están abiertos, no sólo a cambios de nombres, sino también de algún ajuste ocasional de sistema.
FG_AUTHORS: La Capital – Ovación