A 40 años de la guerra perdida con el Reino Unido, el Gobierno peronista lanza una agenda interministerial para concientizar sobre el pedido de soberanía.
El presidente de Argentina, Alberto Fernández, anunció este viernes el lanzamiento de la Agenda Malvinas 40 Años, con la intención de planificar estrategias para reclamar la soberanía en el archipiélago y concientizar sobre la postura de Buenos Aires en el conflicto territorial. Este evento se produjo a casi cuatro décadas de la guerra con el Reino Unido, iniciada el 2 de abril de 1982, cuando el país sudamericano era gobernado por una dictadura militar.
«Las Malvinas fueron, son y serán argentinas», sostuvo el jefe de Estado. «Mal que les pese a algunos, no cabe ninguna duda del derecho que nos cabe sobre esas tierras», añadió. Y, de cara al futuro, prometió: «Vamos a pelear hasta que ellas vuelvan a ser nuestras. Es la argentinidad toda la que quiere recuperarlas».
«Soberanía es cuidar nuestros recursos marítimos»
La intención de la administración peronista es implementar un plan entre distintos ministerios para difundir el planteo oficial a la ciudadanía. Entre sus pilares, está el pedido para reanudar el diálogo con Reino Unido, ratificar la paz para resolver la disputa y homenajear a los soldados caídos.
En la presentación de esta nueva agenda común, se mostró un mapa bicontinental, remarcando la cercanía del continente americano con las islas, aunque estén administradas por el Reino Unido. Al respecto, Fernández recalcó otros asuntos estratégicos de aquella zona: «Soberanía es cuidar nuestros recursos marítimos. Debemos darnos cuenta de lo importante que podemos ser».
Sobre el posicionamiento gubernamental, el líder sudamericano señaló que su administración insistirá «por la vía diplomática, tratando de convencer al mundo de que las Malvinas son argentinas». En sintonía, el canciller, Santiago Cafiero, apuesta por el diálogo, pero igualmente adelantó que su país seguirá denunciando «la presencia militar injustificada».
Las Islas Malvinas, ubicadas junto a la provincia de Tierra del Fuego, en el extremo sur del océano Atlántico, fueron gobernadas por la administración argentina desde 1829. En 1833, el Reino Unido ocupó el archipiélago, desalojó a las autoridades sudamericanas y desde entonces ejerce el dominio del lugar.
En 1982, la dictadura argentina decidió invadir las islas para recuperarlas, pero los jóvenes uniformados se vieron derrotados ante el sofisticado Ejército inglés: murieron 649 argentinos y 255 británicos. Igualmente, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) insta desde 1965 a sostener un diálogo entre ambas partes para destrabar el conflicto.
TELAM