Según la escena que encontraron, un policía mató en la tarde del Sábado 25 a su hijo de sólo dos años y luego se suicidó disparándose en la cabeza con la misma arma.
Ocurrió en la ciudad de San Lorenzo y ahora intentan establecer las circunstancias que habrían llevado al uniformado a tomar una decisión tan violenta.
Vecinos de Guriel al 800, de San Lorenzo, escucharon cerca de las 18.30 del sábado dos disparos y llamaron a la policía. Cuando llegaron los uniformados encontraron en el piso y ya sin vida a otro policía, un oficial de Guardia de Infantería de Rosario. En la cuna de la habitación estaba el cuerpo de su hijo, un pequeño de apenas dos años.
El bebé dormía boca abajo y le disparó desde corta distancia, tras lo cual el padre se suicidó con la misma arma.
El estruendo de los dos disparos alteraron a los vecinos, que llamaron al Comando Radioeléctrico.
Los investigadores tratan de esclarecer los motivos que desencadenaron la tragedia, pero podría tratarse de un drama pasional ya que la madre del bebé hacía un semana se había ido de la casa luego de una crisis de pareja.
Aparentemente, el oficial habría matado al niño de un disparo y luego se habría quitado la vida.