
Reunión histórica en Shanghái y Pekín-2025
Reunión histórica en Shanghái y Pekín-2025

Pekín/China – Reunión histórica del presidente chino Xi Jinping, el presidente ruso Vladimir Putin, el líder norcoreano Kim Jong-un asistió a la ceremonia 80 años de la derrota de Japón al final de la Segunda Guerra Mundial. Foto: RS/Public Photos
Más allá de las diferentes visiones geopolíticas las cuatro jornadas de la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghái y la celebración en Pekín suponen un punto de inflexión en la situación actual. Lo que venga en adelante ya no será más de lo mismo.
En el artículo 30 de septiembre de 2022, otra historia expusimos que dos acontecimientos, que marcaron aquel final de septiembre de aquel año, significaban un punto de «transición de fase» a hacer constar en la gráfica de la evolución sistémica. Estos acontecimientos fueron el atentado a los gasoductos Nord Stream y la firma de adhesión de la República Popular de Lugansk, la República Popular de Donetsk, la región de Zaporiyia y la región de Jersón a la Federación Rusa.
Este tipo de respuesta a las agresiones estadounidenses es paradigmático de un estilo firme y metódico de Rusia, que se ha ido mostrando cada vez con más claridad en los eventos subsiguientes, alcanzando su punto álgido en la cumbre de Alaska de 2025 entre Trump y Putin.
De este modo, Rusia ha pasado a convertirse en referente de estilo diplomático mundial. Todo lo contrario a lo que un grupo de majaderos occidentales elitistas pretendió: el aislamiento y la balcanización de Rusia.
Analistas serios* han dicho que a partir de la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghái, China ha asumido el rol que le corresponde de liderazgo mundial por su desarrollo tecnológico y potencia económica. Han destacado también la gran alianza de oriente y el llamado sur global en la que el reconocimiento de un líder no supone la humillación y subyugación de sus aliados.
*Ponemos el asterisco habida cuenta de un entramado occidental de comunicación en el que toda información parece un chiste de mal gusto y donde se mantiene la censura sobre muchos medios de comunicación rusos.
Las fotos de Shanghái y Pekín lo dicen todo…
El mundo entero quedó impactado por el impresionante desfile militar más grande de la historia de China en la conmemoración de los 80 años de la victoria sobre Japón en 1945, marcando el final de la segunda guerra mundial.
En el marco del 80.º aniversario del fin de la Segunda Guerra Mundial, el mundo vuelve la mirada hacia una de sus páginas más oscuras. El temido Escuadrón 731 del Ejército Imperial Japonés se convirtió en símbolo del horror, donde la ciencia fue utilizada como instrumento de tortura y exterminio. Décadas después, las voces de las víctimas y los archivos desclasificados siguen revelando la magnitud de aquellos crímenes contra la humanidad. VIDEO: RT
Un protocolo lleno de mensajes como ver al presidente Xi Jinping vestido de Mao Zedong, o la caminata hacia el palco para presenciar el desfile militar conmemorativo liderada por Xi Jinping junto a Vladimir Putin y Kim Jong-un, mientras que docenas de líderes mundiales les acompañan.
Pasados 34 años en que el bloque occidental liderado por EEUU se impusiera en la guerra fría, la política belicista, injerencista y terrorista de Washington le ha pasado factura. La recurrente frase de los mafiosos «solo son negocios» para justificar cualquier cosa y para dominar a otros está fuera del proceso histórico actual, ahora se trata de principios civilizatorios. Occidente ya puede ir tomando nota del cambio de paradigma.
El club Bilderberg y cía necesitan una reunión de emergencia, mientras Washington desconcertado sigue a lo suyo, amenazando no solo a enemigos sino a aliados en su desesperación de ver cómo su hegemonía se debilita día a día.
El imperio decadente obliga a sus socios a comprar energía más costosa con tal de intentar debilitar a Moscú y a Beijing. Ahora ha acercado a India a Rusia y China al reclamar sumisión y extorsionar a Nueva Delhi mediante el uso de su sistema financiero para imponer sanciones. Narendra Modi, cogido de la mano de Putin en Shanghái, significa que India ya no rinde pleitesía a EEUU bajo ningún tipo de presión.
Estos gestos se han convertido en la referencia para Brasil y todo el continente americano que ya no temen romper sus lazos comerciales con EEUU, a sabiendas de que la mayoría global que se está constituyendo les acogerá y ayudará.
EEUU, sumamente dependiente del petróleo, ve como la primera potencia petrolera, Venezuela, que posee las reservas mundiales más grandes podría irse para el bloque BRICS con la expectativa del desarrollo e inversión de China que haría de Venezuela la potencia energética y económica de todo el hemisferio.
Estados Unidos alcanzará en 2025 una producción histórica de alrededor de 13,4 a 13,65 millones de barriles diarios (bpd) pero su consumo se estima que será de 20,6 millones de bpd, con lo que no alcanza con su producción y además pretende obligar a otros países a comprar su petróleo como factor de extorsión. ¿Hasta dónde podrá extorsionar y dominar al mundo con un recurso escaso para él mismo?
De otra parte, la tercera nación con mayores reservas de petróleo, Irán, que ya es parte de los BRICS puede aportar nuevas rutas comerciales a China y a Rusia en la zona euroasiática. Se trata de la zona más preocupante del planeta en estos momentos en los que el imperialismo americano se debate entre apoyar sin freno el proyecto genocida del gran Israel o rendirse a la superioridad de los BRICS y tratar de formar parte. Un error en la apreciación de las fuerzas implicadas y sus potencialidades podría llevar a una confrontación termonuclear mundial. El proyecto sionista tiene el ingrediente de síndrome de catastrofilia (Akop Nazaretián, 2017) que lo hace difícil de erradicar; no está en su propósito el entendimiento, sino, la dominación y la barbarie.
Podemos decir que tras la cumbre de Shanghái y el desfile militar conmemorativo en Pekín el mundo se ha aproximado a la paz. «Es hora de una nueva gobernanza pero basada en el respeto, la soberanía y la paz», dijo Xi Jinping en su discurso de la cumbre. No obstante, todavía queda mucho recorrido, afirman los analistas.
Javier Belda – IHPS
Foto de portada: Tianjin/China 09/01/2025 Presidente de Rusia, Vladímir Putin: Presidente Xi Jinping, colegas durante una primera reunión en una reunión de tan amplio formato, que reúne a los jefes de Estado de la Organización de Cooperación de Shanghai, líderes de los estados observadores de la OCS y socios de diálogo de la presidencia, invitados de honor a la presidencia y a los jefes de importantes organizaciones internacionales.Foto: Sergei Bobylev, RIA Novosti
Fuente: Instituto Humanista de Pronosticación Sistémica
Autor: Javier Belda