PRESSENZA · Ecología y Medio Ambiente
Al igual que los oasis que son lugares fértiles en medio de zonas desoladas, los oasis del cambio son espacios vivos en los que lo nuevo, lo que da vida, ha empezado a germinar; son claros de esperanza en medio de una civilización que se derrumba y que destruye las bases de la vida de las personas y de su entorno. Los oasis de cambio más típicos son, por ejemplo, las ecoaldeas que hay ya en todo el mundo.
Lo nuevo empuja hacia la luz
Un número cada vez mayor de jóvenes preferiría dedicar su energía a desarrollar un modo de vida ecológicamente sostenible que malgastar su vida en un sistema que está librando claramente una guerra contra la naturaleza, es decir, contra su propio futuro. El cambio y la transformación vienen de abajo, desde dentro, del individuo y desde lo pequeño – raramente desde arriba. Los oasis de cambio son comparables a los dientes de león que brotan en el pavimento. Lo nuevo no espera a que lo llamen, llega y se abre camino hacia la luz.
Al principio, se desarrolla en células individuales de vida, que con el paso del tiempo se fusionan en organismos complejos, comunidades vivas, grupos de casas, nidos de resistencia, que no se agotan en ideologías, sino que permanecen abiertos al cambio constante que acompaña a toda vida sana. Todos estos organismos sociales necesitan y crean espacios en los que pueda tener lugar la reorganización. Es aquí donde se ensayan nuevas formas de vivir y convivir y donde se visualiza, ejemplifica y comunica en la práctica un futuro respetuoso con la Tierra. Más que nunca, es importante -y esto ocurre cada vez con más frecuencia- crear oasis sociales y culturales en los que, además de una infraestructura ecológica, una forma cooperativa y sincera de interactuar y vivir determine la forma de actuar y comunicarse de las personas. Se están creando lugares en los que la gente se autodetermina, es eficaz, autosuficiente e independiente.
Espacios para una nueva forma de vida
Los WandelOasen son espacios que llevamos dentro como una esperanza silenciosa. En ellos se despliega un modo de vida caracterizado por la conciencia ecológica y planetaria. Sus habitantes saben que la vida, la tierra y la comunidad, el agua, el aire y los alimentos son regalos y organizan sus actividades cotidianas en consecuencia. Estos «lugares del futuro» fomentan y desarrollan la auto-eficacia de cada individuo implicado en el proyecto. Idealmente, esto sucede de una manera cooperativa, benévola y promotora de la paz. El objetivo de cada WandelOase es crear un espacio vital cada vez más autosuficiente y autodeterminado para hacer tangibles a los demás los contornos y las formas de un modo de vida respetuoso con la Tierra. Los WandelOasen son contra-diseños y, por tanto, siempre son también proyectos políticos, sin necesidad de subrayarlo a diario.
Mano a corazón – comercio con corazón
¿De qué tipo de cambio se trata? En los WandelOasen, la gente no piensa en términos de amigo-enemigo, arriba-abajo o esquemas de beneficios. Trabajan por un modo de vida moderno, sostenible y basado en la confianza. El pensamiento y el comportamiento ecológicos, la coexistencia pacífica y cooperativa, la gestión sostenible y la conciencia espiritual son sus valores fundamentales para la convivencia. La competencia antes que nada generaría algo indeseado: la perturbación. El desarrollo creativo del potencial humano ocupa un lugar central.
La agudización y ampliación de la conciencia, así como el ser consciente van de la mano de la organización externa y material. La acción sentida y la cooperación benevolente por la causa común son las corrientes en las que se apoyan los WandelOasen. Cuanto mejor se cuiden, más vigorosamente brotarán los manantiales. En los WandelOasen, las personas se educan y se forman a través de la vida misma, haciendo y estando juntos. Todo ocurre con la intención consciente y atenta de establecer un modo de vida pacífico entre las personas y dedicarse a su propio desarrollo espiritual personal.
Los WandelOasen son:
– Proyectos valientes en plazas, ciudades y barrios, en pueblos, molinos y granjas, en y sobre los que el cambio socioecológico en la agricultura y el suministro de energía, así como en el diseño del espacio vital y la comunicación personal, se plasman del mismo modo que el cambio interior y espiritual.
– Espacios para la experimentación y el desarrollo, es decir, verdaderos laboratorios sociales en los que puede y debe tener lugar la evolución cultural de la sociedad, en los que se superen viejos paradigmas y se encuentre el espíritu colectivo de una conciencia de «nosotros» sostenible y poco jerarquizada.
– Espacios vitales pequeños y grandes -una comunidad alternativa, una granja ecológica, una ecoaldea o una comuna- donde ya sopla el viento fresco del cambio, esparciendo el aroma de las visiones de una nueva forma de vida e inspirando a los visitantes con el espíritu del cambio.
– Un modo de vida en armonía con la naturaleza y la creación.
– Lugares que difunden y practican la magia de una vida autodeterminada y cooperativa.
Literatura:
WandelOasen, Manual para aldeas solidarias y comunidades sostenibles de Alander Baltosée 171 páginas, ISBN 978-3-947707-003, 14,80 euros o ebook ISBN 978-3-947707-010, 7,49 euros
para encargarlo en Books on Demand o directamente al autor: baltosee@oekoligenta.de.
Bobby Langer / PRESSENZA · Ecología y Medio Ambiente
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