por Julio Ramirez… Dos de hombres del gabinete de la Presidenta que mayores dolores de cabeza le generaron al sector productivo en los últimos tiempos, mostraron ayer…
Dos de hombres del gabinete de la Presidenta que mayores dolores de cabeza le generaron al sector productivo en los últimos tiempos, mostraron ayer gestos pocos felices en palco del acto kirchnerista. Uno de ellos es el responsable de la suba de las retenciones que originó el paro del campo, el otro, el «vigilante de los precios» y los controles desmedidos.
La esencia de la discusión entre el ministro de Economía Lousteau y el polémico secretario de Comercio, Guillermo Moreno no se podía precisar desde abajo y tampoco desde la tele, pero el lenguaje corporal de ambos, parecia hablar de una nueva confrontación o pases de «facturas». Moreno hizo entre otros ademanes, uno con su dedo índice sobre su cuello, simbolizando un corte por la garganta, a lo que Lousteau prefirió responder con una risa tipo hiena, como desentendiéndose del gesto.
Fue un show de gestos en el momento mas impropio. En estas circunstancias el gobierno debe mostrar seriedad ante una sociedad expectante y que pedía en forma rápida la finalización del conflicto con la dirigencia del campo.
Ambos funcionarios se mostraron sin pudor ante quien quisiera observarlos, como despreocupados por el acto, la gente y las implacables cámaras de TV.
En una sola cosa parecen haber coincidido, mientras su Presidenta intentaba levantar pasiones» partidarias» y era en el particular modo de llevar «flojos los nudos de las corbatas».
Es de esperar, que ellos junto con D’Elia reciban la reprimenda de «su patrona» pues ente los tres el gobierno, mostró la hilacha.
Julio Ramírez
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