Los vecinos de la ciudad entreriana de Victoria están organizando un reclamo masivo y popular para que termine la obra.
En Rosario están de acuerdo y van a apoyar la iniciativa, pero hasta ahora no hay ninguna convocatoria a un acto similar en el obrador local.
El intendente Hermes Binner quiere ver al presidente Eduardo Duhalde junto a las fuerzas vivas de la ciudad para exigirle que la obra se concluya. … En tanto, los empresarios ya empezaron a armar petitorios para reclamar ante las autoridades y estudian si harán un acto en la cabecera de Rosario como el que habrá del otro lado del río el próximo 17 de agosto.
La iniciativa de los victorienses de organizar un gran acto para exigir a la Nación que obligue a la empresa a terminar la conexión vial cayó bien entre los rosarinos. Y más si se tiene en cuenta que los entrerrianos quieren que en la ciudad se organice una convocatoria similar. Ahora hay que esperar quién dará el primer paso para promover la movilización.
La obra, que está ejecutada en algo más del 90%, se paralizó casi por completo en marzo pasado porque se cayó un crédito externo que le hubiera permitido a la constructora concluir con los trabajos. Hoy el obrador está casi desierto y el puente no se va a inaugurar en septiembre, tal como está previsto en el contrato.
Con respecto a la pueblada de Victoria, Binner tomó distancia: «cada ciudad tiene su forma de abordar el problema». Y espera una respuesta del gobernador Carlos Reutemann a quien «se le pidió, en el último encuentro del PER (Plan Estratégico Rosario), que presida una entrevista con Duhalde y todas las fuerzas vivas de la ciudad y la región para pedirle que se concrete la obra».
Si bien está de acuerdo con la propuesta victoriense, el intendente no va a convocar a una movilización similar. Adujo «los peligros» que habría en el caso de llevar la gente al obrador. Es que la idea original que se barajó en Entre Ríos era avanzar sobre la conexión y juntarse con los rosarinos a mitad de camino. Pero en definitiva se hará un acto en la cabecera y se firmará un petitorio. Hoy en el Concejo Municipal de Victoria se definirá el contenido del escrito a presentar a los funcionarios de la Nación.
La novedad también repercutió en el Concejo de Rosario. Allí se evaluaba ayer «hacer una gran movilización y concentrar en las dos cabeceras». También se hacía referencia a presionar a la empresa para que termine la obra y en exigir «una auditoría para ver cómo se gastaron los fondos aportados por el Estado al proyecto».
Otras opiniones apuntaban a que la convocatoria desde Rosario «debería partir» de Binner. «Habría que propiciar una catarata de petitorios de empresas, instituciones, entidades intermedias y ciudadanos para que esto llegue a Buenos Aires», lanzó más de uno a modo de propuesta.
Y la Asociación Empresaria de Rosario ya arrancó: hará firmar planillas de adhesión a la propuesta para pedir la finalización del puente y la semana que viene establecerá distintos puntos callejeros para juntar firmas. «Comienza una etapa de movilización», anticipó Elías Soso, presidente de la entidad.
Los empresarios todavía no han definido si convocarán a un acto similar al de Victoria en el obrador rosarino.
Los victorienses que viven en Rosario también se sumarán a las actividades, como era de esperar. Es más, hay preocupación por la demora en algunas inversiones en marcha sobre la costa entrerriana a partir de la paralización de los trabajos, según advirtió el empresario Alfredo Román, nacido en Victoria y rosarino por adopción. Los legisladores nacionales también apoyaron la iniciativa, aunque con diferentes tonos. Al justicialista Jorge Obeid le pareció «excelente» y prometió estar presente. Y el socialista Rubén Giustiniani la calificó de «positiva».
Todos están a favor de que el gobierno nacional exija a la empresa que cumpla con el contrato y termine la obra, para después, si es necesario, renegociar, tal como fue solicitado por el privado.
Un funcionario cercano al gabinete de Reutemann dijo: «es bueno que la población se movilice, ayudará sin dudas». En la Nación ya se enteraron y no hubo mayores comentarios. Un alto funcionario vinculado al Rosario-Victoria señaló que «las cosas no se arreglan así».