El pasado 2 de abril en el Batallón 121 de Rosario, los excombatientes que estaban ahí realizando tareas solidarias con los evacuados, quisieron realizar un acto recordarorio de la gesta de Malvinas. No les permitieron hacerlo, hecho que muchos sintieron como una afrenta al cariño y respeto que les tenemos los argentinos Rosario, 3 de Abril de 2007
Ante la afrenta de prohibir un homenaje en el Batallón 121 de Rosario.
Malvinas y los excombatientes: 25 años de testimonio solidario.
Opinión, por Julio López
La gesta de Malvinas es imborrable para los argentinos a pesar de la Junta Militar que la promovió. La prohibición por el ejército, que impidió a los excombatientes realizar una actividad recordatoria en el Batallón 121 de Rosario donde realizan tareas solidarias con los evacuados, es una afrenta al cariño y respeto que les tenemos los argentinos. El espíritu de solidaridad y hermandad con nuestro pueblo de los excombatientes, es el espejo para refundar unas fuerzas armadas para la democracia.
Malvinas fue, 25 años atrás, la gesta de un pueblo embarrada por la codicia de una Junta Militar incapaz de enfrentar a ningún enemigo real, pero especializada en saquear y asesinar a los argentinos.
Abandonados a su suerte en la guerra por cúpulas incompetentes, los combatientes en malvinas hicieron gala de dos valores fuertísimos que siempre anidaron en nuestro pueblo: la solidaridad y el coraje para enfrentar a nuestros enemigos de adentro y de afuera, por más poderosos que fueran. Una vez en casa, el Estado militar primero y el democrático después intentó esconderlos y olvidarlos. Los mismos que inventaron la teoría donde los jóvenes que peleaban por un país para todos eran un demonio enfrentado con otro demonio militar del terrorismo de estado, trataron de instalar que los excombatientes eran una verguenza para los argentinos.
Sin embargo los santafesinos los conocemos bien, no sólo porque son nuestros hermanos, vecinos, hijos, padres y amigos. Los conocemos bien porque en cada crisis que debimos padecer, allí estuvieron los excombatientes enarbolando su solidaridad.
El contraste con gran parte de los mandos militares actualmente en funciones es patente. Oficiales que a lo largo de estos años mataron a nuestros pibes, reprimieron a nuestro pueblo, y nunca elevaron la voz para reclamar por la entrega de nuestro patrimonio ni la exclusión de nuestros hermanos. El presidente Kirchner está decidido a reconstruir unas fuerzas armadas de y para los argentinos, y ya ha dado pasos importantes en este sentido.
En las inundaciones del 2003 en Santa Fe, en medio del caos generado por el desastre, cuando la tragedia desesperaba a los afectados, fueron muy pocos los que pudieron acceder sin ser repudiados, los que tenían una voz autorizada para organizar o un consejo que atender: los excombatientes fueron los primeros. Esa confianza que les tuvo nuestro pueblo en un momento tan difícil, es la muestra más palpable de lo que significan para todos.
En estos días en que revivimos ese drama en muchos lugares de la provincia, allí también están ellos poniendo el hombro una vez más. El Batallón 121 de Rosario fue uno de los centros de evacuados donde trabajaron desde el primer momento. La madrugada del 2 de Abril, autoridades militares les impidieron realizar allí una actividad recordatoria para contar lo que significa para ellos Malvinas. A pesar de la prohibir el acto no lograron su objetivo, porque ya lo habían trasmitido antes: su mejor testimonio fue la solidaridad durante toda la semana.
La actitud vergonzante de prohibir el recordatorio marca la necesidad urgente de que los militares recuperen el espíritu sanmartiniano de servicio, solidaridad y hermanamiento con el pueblo. No es necesario buscar mucho para eso, lo tenemos hoy aquí nomás: los santafesinos sabemos que los excombatientes son el ejemplo que buscamos, el espejo donde debemos mirar para refundar unas fuerzas armadas para la democracia y el pueblo.
El cariño popular que los cobija en cada momento, es probablemente el mejor homenaje para los soldados combatientes en Malvinas ayer, y luchadores por la dignidad hoy. Su historia lo amerita, pero sobre todo su presente actualiza a cada momento ese espíritu en el que los argentinos queremos siempre reflejarnos. 25 años después siguen siendo cada vez más necesarios.
Julio López
Movimiento Barrios de Pie
Movimiento Libres del Sur
Provincia de Santa Fe
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