En el último mes se ha hecho común ver a la gente andar con el pañuelo en la mano, el agua cayendo de la nariz y a los estornudos… Es que en primavera se da uno de los procesos alérgicos más molestos, la rinitis, que suele confundirse con un resfrío y afecta alrededor de un 13% de la población. Y todo el mundo culpa al polvillo de los plátanos, pero es baja su incidencia desde el punto de vista inmunológico.
Las alergias son distintas reacciones del organismo ante estímulos comunes como los alimentos, medicamentos y polvos. Por deducción, se estima que el 20% de la población argentina está afectada por este tipo de procesos.
La prevalencia de síntomas alérgicos en Rosario oscila entre un 40 y 60% de los habitantes. Los síntomas de las alergias aparecen según el órgano que afectan: el asma bronquial (bronquios), los eczemas (piel) y la rinitis (nariz).
«Ha habido más consultas por rinitis por la época del año, pero no más que el año pasado», afirmó Gustavo Arnoldt, del Servicio de Alergia e Inmunología del Hospital de Niños Víctor J. Vilela. Pero con los años cada vez hay más alérgicos.
La rinitis es un proceso inflamatorio, alérgico o no, que se puede producir en una determinada estación del año (primavera o verano) o bien durante todo el año. Hay muchos resfríos que suelen ser confundidos con rinitis. En este último caso la sintomatología (congestión nasal, picazón en la nariz, estornudos) se repite.
«Generalmente las rinitis alérgicas estacionales se deben al polen y se van cuando termina la temporada o los días de lluvia», advirtió Ricardo Ensinck, miembro de la Academia Americana de Alergia, Asma e Inmunología. Quizás por eso se nota en los consultorios la falta de continuidad de los tratamientos, y más en los sectores medios y bajos. Ensinck lo vincula con la crisis y el aumento del costo de los medicamentos, ya que se dejan de usar los polvos para inhalar y se recurre más a los remedios caseros: nebulizaciones, bahos e inhalaciones.
En las rinitis que aparecen en el resto del año ya no sólo intervienen los alergenos del medio ambiente sino también los intradomiciliarios. «La gente pasa la mayoría del tiempo encerrada y bajo techo, entonces los factores que están dentro de la casa son preponderantes a la hora de provocar una alergia», definió Ledit Ardusso, de la Asociación de Alergia e Inmunología.
Las alergias más frecuentes se producen por los ácaros (seres microscópicos) que están en las alfombras, frazadas, cortinas, el pelo de los animales, colchones no aireados y muñecos de peluche.
Según un estudio conjunto de dos cátedras de la Universidad Nacional de Rosario, el 80% de los rosarinos es alérgico a un solo ácaro del polvo que se encuentra en los colchones.
Otros alergenos son los hongos de la humedad que derivan de restos de alimentos, cortinas de baño, sótanos, basurales y excrementos de animales, entre otros. También los cambios climáticos son disparadores de alergias.
Los especialistas buscan desmitificar el efecto de los plátanos. Según Ardusso, sólo un 17% de los alérgicos en Rosario lo son al polen de esos árboles. A los otros alérgicos y al resto de la población no les afecta. El profesional recordó otro estudio local que demuestra que de 33 tipos de pólenes de las plantas más comunes de Rosario, entre los árboles el polen del fresno es el que da más alergia y luego le sigue el plátano. Por eso, «a los plátanos hay que podarlos, mantenerlos y reponerlos, pero sacarlos, jamas», concluyó.