"Es realmente indescriptible. Y seguía acelerando hacia afuera, absorbiendo, observando. Galaxias enteras se hicieron del tamaño de granos de arena"…
¿Qué es una experiencia cercana a la muerte?
Así describía Mark Horton, un experto programador de ordenadores norteamericano, lo que sintió cuando estaba al borde de la muerte:
<<Estuve a punto de morir por un cese total en la actividad de los riñones, del hígado y de la respiración. Además tenía interiormente una pérdida masiva de sangre y la anemia asociada. Como estuve en coma, no sé cuándo ocurrió en realidad mi experiencia cercana a la muerte. A partir de la lectura de los informes médicos y otras evidencias posteriores he deducido que fue en 1992, la víspera del Año Nuevo.
Esa noche mis riñones y mi hígado dejaron de funcionar y los doctores le dijeron a mis padres que deberían contactar con una funeraria porque era muy difícil que sobreviviera una noche más. Y, aunque la superara, tendrían que hacerme una diálisis a la mañana siguiente y el shock acabaría con mi vida. Durante la noche, según he leído en los informes médicos, me pusieron respiración asistida total. Así estaba, con los riñones y el hígado sin funcionar, almacenando fluidos, con neumonía y con una máquina que respiraba por mí. Sospecho que fue entonces cuando "dejé mi cuerpo".
Tengo un recuerdo muy vago de ver un cuerpo debajo, en una cama y con tubos y máquinas, pero, honestamente, no puedo decir que fuera el mío. Estaba sostenido, contenido, soportado, mantenido en un medio de algún tipo, cálido y seco. Me encontraba suspendido, sin presión ni cualquier otra sensación de estar contenido en algo, sólo allí. Me sentía seguro, cómodo, sereno, sin dolor y sin ver borroso, completamente consciente. Entonces comenzó la "experiencia". De repente la oscuridad se hizo total y comencé a ascender, sin ninguna sensación de presión, hacia arriba, hasta un punto elevado. Era puro intelecto, absorbiendo información y conocimiento a través de "sensores" o medios que no entiendo. Desde ese punto de privilegio podía pensar en el lugar y el tiempo en el que estaba, recordando todo acerca del presente.
Siempre he sentido, no sé por qué, una tendencia muy fuerte hacia Escocia. Tengo algunos ancestros escoceses pero no más que ingleses, suecos, prusianos,… pero aún así tengo una fuerte afinidad por esa tierra, su historia, su cultura y su música. Ningún sonido en este mundo me produce más sentimientos que las gaitas. Bien, uno de mis primeros "viajes" fue a Escocia, mirando desde lo alto de un acantilado a un mar gris y turbulento durante una gran tormenta. ¡Estaba allí! Podía sentir el viento soplando en mi cara y la fuerza de la lluvia mientras veía y oía el ruido de los truenos y del mar. Todo lo que yo había hecho era pensar momentáneamente en esa tierra y ahora estaba allí. Como ya he dicho, no sé por qué siento esos lazos tan fuertes con ese trozo particular de espacio-tiempo.
Después de eso pensé en un sol cálido y me encontré en un lugar de luz brillante y confort. No podía discernir nada más que un brillo confortante a mi alrededor. Todavía no tenía ningún "cuerpo", que yo recuerde, pero tuve la "sensación" de que era amorfo, un brillante intelecto puro, todo sensores y nada cuerpo físico tangible para arrastrarme abajo o contenerme. Fue una maravillosa ¿sensación?, ¿estado?, ¿ser? No existen palabras para describir esto. Fue muy placentero y confortable y se produjo en microsegundos o en billones de años, no tengo ni idea, ya que el tiempo no era otra cosa que una construcción operativa y que no tenía significado o relevancia para la existencia. Tenía, literalmente, la sensación de que yo era todos los lugares del universo a la vez.
El brillo cesó y fue reemplazado con una visión de la Tierra que se movía rápidamente "debajo" de mí. Estaba todavía envuelto en una sensación de calidez y confort, pero moviéndome hacia atrás a una velocidad cada vez mayor. La visión de la tierra pasó a ser, casi instantáneamente, una vista general de nuestro sistema solar y luego un cúmulo de sistemas de estrellas que, aparentemente, era uno de los brazos de nuestra galaxia. Estaba todavía absorbiendo todo esto en muchos niveles diferentes, más allá de lo que nosotros conocemos como ver. Todavía podía sentir la localización de nuestro planeta, aunque a esta distancia debería haber resultado imposible en el continuo normal espacio-tiempo. Todos mis sentimientos eran de comodidad, admiración, asombro, pertenencia, una sensación de "todo está bien" que lo llenaba todo y que sólo puedo llamar un amor todopoderoso, aunque esa palabra es terriblemente inadecuada para describir aquellos sentimientos.
Todavía seguía moviéndome (hacia atrás siempre, por alguna razón) cuando, de repente, me relajé completamente y me permití "a mí mismo" ¿disolverme?, ¿extenderme?, ¿mezclarme? en la "unidad" que me rodeaba. La explosión de emociones y (otra vez las palabras no pueden describirlo) "amor" todopoderoso que sentía ahora hicieron que cualquier sentimiento previo que había experimentado antes se quedara en nada. Posiblemente no podría poner en palabras de ningún idioma humano lo que es ese sentimiento. Estaba en todas las cosas pero no estaba en nada, estaba en todos los lugares pero no estaba en ningún lugar. Mi intelecto se había expandido para contenerlo todo, el tiempo, el lugar e incluso el ser que era, soy o siempre sería. Yo era único en ese momento, la parte más pequeña de lo absoluto. Sé que esto parece ininteligible…, incluso a mí me lo parece cuando lo leo en el papel; pero yo lo he sentido. No existen palabras para describir el gozo y el amor y la calidez.
Es realmente indescriptible. Y seguía acelerando hacia afuera, absorbiendo, observando. Galaxias enteras se hicieron del tamaño de granos de arena. Vi galaxias inmensas colisionando y juntándose. Vi "agujeros" en el espacio que no eran agujeros del todo, sino que estaban rellenos de alguna cosa que no pude entender incluso en mi estado "capacitado", ¿protogalaxias quizás? Y había allí tantas galaxias para ver. Pero aún podía sentir dónde se encontraba nuestro planeta. Digo sentir porque nuestra diminuta Vía Láctea se había desvanecido; podía sentirla allí, pero no verla. Y seguía yendo hacia afuera. Empecé a distinguir una curvatura y me di cuenta de que el universo era realmente una gran esfera que contiene todas las galaxias. Se hizo más y más aparente conforme me movía (siempre hacia atrás) en el "espacio oscuro" más allá de la esfera de galaxias. Todavía me topaba, de vez en cuando, con algunas galaxias mientras continuaba moviéndome hacia fuera. Y entonces "sentí" alguna clase de presencia grande detrás de mí. Parecía que disminuía mi velocidad ligeramente y pasaba a través de esa barrera y miraba hacia abajo, a la esfera que contenía nuestro universo. Parecía transparente y ligeramente opaca a la vez, como si estuviera viendo los campos de energía que la contenían. La imagen de las capas de electrones de un átomo sería apropiada para describirlo.
Continuaba moviéndome hacia afuera y ahora veía con dificultad la tímida curvatura de nuestro universo y otras esferas que sólo podían ser otros universos. Las esferas parecían estar ordenadas de alguna forma, una capa esférica de universos alrededor de un núcleo que no podía ver. Y más allá de esta capa, otra, hacia la cual me estaba dirigiendo a gran velocidad. La impresión general de lo que había dejado era algo así como esas piezas pequeñas de "esferas dentro de esferas" de marfil que uno suele ver en las tiendas de regalos. No llegué a la siguiente capa. Cuando estaba moviéndome hacia la siguiente capa de universos, algo empezó a empujarme y comencé a ir hacia delante, al interior de nuestro universo. Las otras galaxias dentro de nuestro universo ya no estaban y tuve una última "visión" de nuestra Vía Láctea. Luego regresé. Aturdido, confundido, triste, con un tremendo sentido de pérdida, empecé a hacer conjeturas sobre la carencia de conocimiento y amor y "unidad" que había sentido. Mi experiencia cercana a la muerte había terminado.
Salí y entré del coma durante algún tiempo después de la experiencia, no sé cuánto. Durante ese tiempo tuve una mezcla de fuertes sueños, quizás algunas alucinaciones muy vívidas, casi sueños concretos en los cuales "personajes de sueño" tenían cuerpos sólidos y reales y con quien pude mantener conversaciones normales y lógicas, y también algunas "mini-experiencias cercanas a la muerte" en las cuales era capaz de experimentar algunas pequeñas fracciones del amor todopoderoso y la "unidad" que tuve durante mi "viaje". Luego me di cuenta de que empezaba a "ajustar" mi pensamiento e intentaba inconscientemente ignorar todo lo que me había sucedido para continuar con mi vida. Pero todavía echaba algo de menos…, ese agujero estaba todavía allí mordiendo mi mente.
Finalmente, después de casi un año en el que intenté no pensar más en ello, siempre encontraba que, al meditar o al relajar mi mente, aquellas sensaciones volvían. No podía reprimir por más tiempo esas memorias y yo lo sabía. Así que las dejé entrar de nuevo, y me convencí aún más de que mi experiencia había sido real, que no era sólo una alucinación o un sueño, que todos nosotros somos individuos y "uno" al mismo tiempo, y que la única cosa importante es el amor. Un amor completo, abierto, dadivoso, increíblemente lleno. Esa es la única cosa que importa. Todo lo demás es superfluo. Yo he cambiado para siempre. Todos nosotros somos uno, todos nosotros somos "Dios". O quizás "Dios" es todos nosotros. He pensado mucho tiempo en la frase bíblica "Y Dios hizo al hombre a su imagen y semejanza". Me pregunto si quizás esto significa realmente que el hombre es creado y existe en la imaginación de Dios, la cual es luego la realidad del hombre. No soy un experto en la Biblia y no debatiré sobre teologías porque es algo muy personal, pero esa posible interpretación de la frase bíblica es interesante para mí. No profeso ninguna religión específica, nunca lo he hecho, y definitivamente nunca lo haré, porque son el intento del hombre para cuantificar, regir y controlar incluso el aspecto espiritual del individuo. Ahora sé que vivir siendo generoso y amando a los demás es la única "religión" verdadera, si es que puede etiquetarse con la palabra religión. A partir de lo que he leído acerca de otras personas con la misma experiencia cercana a la muerte, esto parece ser un sentimiento casi universal. Podemos describir lo que hemos "visto" en distintos términos religiosos dependiendo del entorno y las creencias previas a la experiencia, pero el mensaje de amor universal y de perdón es el mismo.
Los efectos posteriores a la experiencia aún están presentes y crecen todos los días. Decir que me ha cambiado completamente es obvio y, a la vez, una afirmación increíble. Todavía estoy interesado por los sistemas de computadoras y trabajo con ellas como profesión, pero estoy más interesado en encontrar cómo las máquinas pueden ayudar de verdad a la gente para que no sean sólo "juguetes" intelectuales que realizan funciones o para que me paguen por diseñarlas y ajustarlas. Nunca he sido materialista externamente en el sentido "yuppie" de la palabra, pero tenía afecto por ciertas posesiones y me preocupaba por ellas; ahora todavía me gusta la belleza de las cosas, pero la posesión de las mismas no me resulta importante. Me encuentro a mí mismo regalando muchos objetos a otros si ellos expresan interés o deseo por tenerlos. Quizás me etiquetan como “tonto”. No me importa. Lloro abiertamente por la tristeza en el mundo y en las vidas de las gentes. Comparto con otras personas que han tenido experiencias cercanas a la muerte una absoluta falta de temor a morir. En realidad es confortable pensar así, ya que me retorna al estado que experimenté y puedo contactar con el sentido de amor por todas las personas y cosas que me rodean, con la paz que siento, cuando capto el dolor de los demás y me gustaría aliviarlos dejando que su dolor penetrara en mí. En resumen, supongo que la cuestión que muchos me harían es: ¿Tuvo algún valor la experiencia? Y yo respondería gozosamente: “¡Sí!”.>>
Mark Horton murió, esta vez definitivamente, el 7 de Septiembre de 1996 como consecuencia de sus dolencias de riñón y de hígado.
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Agradecemos a Sebastián Odasso el envío de este material.