El intentende Miguel Lifschitz presidió el acto de presentación de la colección de grabados de Goya junto con el secretario de Cultura y Educación, Fernando Farina
El Museo Municipal de Bellas Artes Juan B. Castagnino presentó el día 28 de marzo la serie de grabados “Tauromaquia”, realizados por Francisco de Goya y Lucientes, que se incorporará a la colección del Museo Castagnino+Macro, a partir de una donación de la Fundación Museo Castagnino.
El acto fue presidido por el intendente municipal, Miguel Lifschitz y participaron el secretario de Cultura y Educación, Fernando Farina y los directores del Museo, Carlos Herrera y Roberto Echen, al igual que integrantes de la Fundación del Museo Castagnino.
La serie “Tauromaquia” (datada entre 1814 y 1816) ha sido considerada de carácter popular en el recuerdo de los personajes del mundo de los toros, que supuestamente interesaba especialmente a Goya y que lo contaba como uno de sus mejores aficionados durante su juventud. El tema de la misma es el drama y el artista lo desarrolla centrándose en la imagen del enfrentamiento entre el animal y el hombre, entre la vida y la muerte, de manera irracional, violenta y trágica.
La colección, una de las más divulgadas del autor, ilustra diversos temas relacionados con el toreo y se inicia con las estampas históricas que reflejan los antecedentes de las corridas, la intervención en actos taurinos de moros, el modo de torear de caballeros antiguos y emblemáticos personajes históricos como Carlos V o el Cid Campeador.
Francisco de Goya ha sido considerado como el grabador más importante de la historia del arte español hasta el siglo XX, aún cuando el grabado sólo fue un medio de expresión más en el desarrollo de su obra.
Sin duda, atraído por el poder de difusión de la estampa, superior al de la pintura, asumió la labor de «regeneración moral» propia del espíritu de la ilustración para llegar a través de este medio a círculos más amplios. De hecho, los temas tratados en las cuatro grandes series tuvieron una proyección popular y encarnaron una fuerte crítica a la sociedad, a la política, y al poder religioso de su época.
Con la incorporación de esta colección el Museo Castagnino pasa a tener la mayor colección de grabados de Goya existentes en la Argentina.