Por Alejandro Gómez
Blas Scoponi y el trabajo incansable de su propia estructura en cuanto al chasis, y el esfuerzo de Fabián Ballina en la motorización, lograron recuperar el buen rendimiento del Volkswagen Gol.
En la jornada sabatina, volvió a los puestos de vanguardia en la clasificación. El día domingo, debido a la lluvia, la pista no estuvo en las mejores condiciones, y la actuación en la serie, se desarrolló con el objetivo de mantenerse a buen ritmo sobre el húmedo asfalto, pensando en la competencia final, instancia que se preveía con pista normal, una circunstancia en la que se había demostrado en clasificación, que el auto funcionaba muy bien.
La décima final del año se desarrolló a 16 vueltas sobre el trazado de 3120 metros de extensión, y Blas logró escalar en el clasificador durante los primeros giros, aunque luego sería chocado por Damián Cavallone, y tras el despiste que le provocó el fuerte golpe, volvió muy retrasado a la pista. Con el auto averiado, intentó recuperar las posiciones perdidas, aunque en el esfuerzo de realizar una buena actuación, se vio involucrado en los roces típicos de la mitad del pelotón, golpeando levemente en una maniobra muy ajustada e involuntaria a Nicolás Gentili, situación por la que fue sancionado y reclasificado en la posición número 25, luego de haber terminado en pista en el puesto 22.
La próxima fecha de la especialidad será el 14 de noviembre en Rafaela.