La creación tiene que ver con todos los seres humanos.
Poema
De repente un día
uno se planta en medio del parque
como un niño que llora con su peluche roto
por su coche policía… por su camión de bomberos
se planta
rostro valiente, adusto, sincero
de frente ante la vida…
y decide pedirle explicaciones a cada amanecer…
decide recordar los tonos de cada ocaso vivido
también decide pisar con más fuerzas las hojas marchitas,
los amarillos, pardos, ocres del suelo
plantarse ante la parsimoniosa figura de la luna llena
para contemplar sin prisas, recordando besos robados a la noche
caricias, suspiros entregados
lágrimas de San Lorenzo
fuegos de Tucumán
caprichos de trenzas doradas
jazmines con fragancias perdidas de repente
asombrado, descubre una perla reluciente
arrastrando emociones, por su pálido y lunático rostro.
Parece ser cómplice de las noches perdidas o halladas.
Hoy más que nunca la fiel confesora de las mil generaciones
la callada respuesta de todas las preguntas
la quieta esperanza de una noche cálida.
Llega uno entonces al misterio más profundo
la razón más insondable de los secretos
la blanca esperanza se le filtra en el alma deseada
invasora de blanca alcurnia
llenando de luces los ojos mustios
llenando de vida los sueños rotos
deja que entre en tí esta noche
de luna llena
Miriam Azerrad