La noticia se formalizó durante la reunión cumbre que mantuvieron los presidentes Alberto Fernández y Xi Jinping en Beijing.
La incorporación al megaproyecto global chino permitirá conseguir más de 23.700 millones de dólares para financiar obras e inversiones. Además, se firmaron otros trece acuerdos de cooperación en diversas áreas.
El presidente Alberto Fernández aprobó este domingo la incorporación de la Argentina a la Franja y Ruta de la Seda, una iniciativa de China para estimular el flujo del comercio y las inversiones, y -de esta manera- obtuvo financiamiento por más de 23 mil millones de dólares, informaron fuentes oficiales.
El entendimiento se oficializó durante la reunión bilateral que Fernández mantuvo con su par Xi Jinping en la madrugada de este domingo en el Gran Palacio del Pueblo, en el marco de la gira internacional que realiza el mandatario argentino, que lo llevó primero a Rusia, luego a China y el lunes a Barbados.
De esta manera, Argentina se suma a los 140 países que ya están adheridos a la Ruta de la Seda china en todo el mundo. El entendimiento se logra en el marco del 50 aniversario del establecimiento de las relaciones diplomáticas entre ambos países.
El financiamiento se obtendrá en dos tramos: uno ya aprobado por 14 mil millones de dólares bajo el mecanismo del Diálogo Estratégico para la Cooperación y Coordinación Económica (DECCE) y otro por 9.700 millones de dólares, aproximadamente, que la Argentina presentará en el Grupo Ad Hoc creado entre ambos países para iniciar el trabajo, tras la adhesión a la Franja y la Ruta de la Seda
«Con esta decisión estratégica, el gobierno nacional rubricará diferentes acuerdos que garantizan financiamiento para inversiones y obras por más de 23.700 millones de dólares, generando un nuevo hito en la relación bilateral que en los últimos 15 años se amplió y fortaleció notablemente», destacaron fuentes oficiales.
El DECCE mantuvo recientemente su quinta reunión de alto nivel, en la que quedó plasmada los principales proyectos de inversión en infraestructura que se realizarán en Argentina, en tanto que se identificaron áreas para promover la inversión directa china.
En tanto, en el Grupo de Trabajo Ad Hoc, Argentina presentará un conjunto de obras de infraestructura relevantes para el sector energético, la red de agua y cloacas, el transporte y la construcción de viviendas, que será discutido con la contraparte china, y que suman un monto cercano a los 9.700 millones de dólares.
Argentina se suma a los 140 países que ya están adheridos a la Ruta de la Seda china en todo el mundo.
Concretamente, la firma del denominado Memorándum de Entendimiento en Materia de Cooperación en el Marco de la Iniciativa de la Franja Económica de la Ruta de la Seda y de la Ruta Marítima de la Seda del Siglo XXI se realizó entre el canciller Santiago Cafiero y He Lifeng, Presidente (chairman) de la Comisión Nacional de Desarrollo y Reforma de la República Popular China, que estuvieron negociando durante todo el sábado para cerrar el acuerdo.
La Iniciativa de la Franja y la Ruta (BRI, por sus siglas en inglés) se orienta a impulsar la cooperación y la conectividad entre los países a través de dos componentes principales: uno de carácter terrestre (la «Franja Económica de la Ruta de la Seda») y otro transoceánico (la «Ruta Marítima de la Seda»).
El proyecto estuvo inicialmente enfocado en Asia Central pero fue ampliando la participación a otras regiones y en la actualidad más de 140 países de África, Asia y Medio Oriente, Europa, América Latina y el Caribe, Oceanía ya se adhirieron.
«La Iniciativa se presenta como una plataforma para promocionar el flujo de comercio e inversiones, la integración de los mercados y la cooperación económica regional abierta e inclusiva», explicaron desde la Cancillería que conduce Cafiero.
Con el objetivo de profundizar la asociación estratégica entre ambos países se discutirán asimismo oportunidades concretas para promover la inversión extranjera directa de China en la Argentina para «ampliar la oferta exportable del país, se trabajará para ampliar la participación de los proveedores argentinos en las obras de infraestructura y se acelerarán las negociaciones sanitarias, fitosanitarias y las habilitaciones para estimular las exportaciones argentinas a China«, según se indicó.
En ese marco, los países acordaron continuar ampliando el volumen comercial y las inversiones bilaterales.
Trece documentos de cooperación
Además de la adhesión a la Nueva Ruta de la Seda, se suscribieron trece documentos de cooperación, referidos a desarrollo verde, economía digital, área espacial, tecnología e innovación, educación y cooperación universitaria, agricultura, ciencias de la tierra, medios públicos de comunicación y energía nuclear.
Según las fuentes oficiales, con los acuerdos anunciados, se profundizan los siguientes objetivos: financiamiento para obras de infraestructura, e incremento de la participación de proveedores argentinas en esas obras y de la Inversión Extranjera Directa (IED) en sectores estratégicos argentinos, tales como la energía y electromovilidad, entre otros.
Además se incrementa la oferta exportable argentina a China y Asia, tendiendo a la reducción del déficit comercial con China, y queda establecido el compromiso de China para avanzar en las negociaciones sanitarias y fitosanitarias y en las habilitaciones para establecimientos frigoríficos y pesqueros.
Antecedentes
Como antecedente, la Cancillería recordó que Argentina participó del Primer Foro de la Franja y la Ruta para la Cooperación Internacional celebrado en Beijing en 2017, a nivel de Jefe de Estado.
Luego, en marzo de 2018, China propuso la firma de un memorándum de entendimiento para la cooperación en el marco de la Iniciativa.
Finalmente, durante la visita de Estado del presidente Jinping a la Argentina -en diciembre de 2018- se plasmó en la Declaración Conjunta y el Plan de Acción Conjunta 2019-2023, que la asociación estratégica integral entre ambos países es extensible a la relación con la Iniciativa de la Franja y la Ruta.
Se precisó asimismo que, a mediano plazo, el Memorándum busca obtener «resultados concretos que permitan impulsar el comercio bilateral en materia de bienes y servicios y concretar inversiones para el sector productivo y para el desarrollo de capacidades tecnológicas».