Para la presidenta honoraria del III Congreso Internacional de la Lengua Española, Cristina Fernández de Kirchner, este evento «fue la concreción de una utopía»… La senadora, quien a diferencia del resto de los oradores del acto de clausura habló sin un discurso escrito, dijo que se pudo «cumplir con una promesa, con un compromiso que habíamos asumido. Y esto es, que el Congreso se iba a realizar, y exitosamente». Por eso manifestó que con la realización del encuentro se dio «un paso adelante, muy fuerte frente a nosotros mismos. Y es que cuando nos ponemos objetivos y trabajamos todos juntos tirando para el mismo lado podemos hacer las cosas bien».
Antes de dar su saludo de despedida, Fernández de Kirchner confesó que jamás imaginó «que iba a estar hablando precisamente en el Congreso Internacional de la Lengua, con las máximas autoridades de nuestro idioma y en presencia de tan importantes intelectuales latinoamericanos y españoles». Y también aclaró que su discurso sería breve.
«No quiero hablar del valor de la palabra desde los lugares que ya se han hecho y con muchísimo más conocimiento que yo, que es desde lo académico y lingüístico. Quiero hacerlo desde la representación política e institucional, es decir, del valor de la palabra como obligación y mandato moral en un ámbito en el que muchas veces no hay coincidencia entre la promesa de la palabra y la realización concreta de los hechos», sostuvo.
Inmediatamente aclaró que «tal vez para muchos no sea importante, pero frente a una sociedad tan castigada como la nuestra en cuanto al incumplimiento de promesas, con tanto descreimiento, este día que culmina hoy exitosamente tiene algo más que el valor académico y lingüístico. Tiene el valor de que podemos hacer las cosas y bien. Y eso no es una cuestión menor, sino fundante y vital».
«Hemos podido realizar esta utopía que era el III Congreso de la Lengua, acá en Rosario y lo hemos hecho exitosamente», se enorgulleció ayer la senadora, quien ahora «como militante política» se refirió a la palabra como «creadora de sueños». «Porque una sociedad más justa tiene que ver con la palabra y con la concreción de sueños», reafirmó.
La primera dama no quiso cerrar el Congreso sin antes «agradecer a todos y cada uno de los brillantes intelectuales que vinieron desde distintos lugares del mundo para debatir acerca de la importancia de la identidad cultural y de la condición humana.
«Gracias Rosario. Gracias Argentina. Gracias a todos los que hicieron posible este congreso que culmina hoy (por ayer) exitosamente. Hemos dado un paso adelante, muy fuerte frente a nosotros mismos. Y eso es que cuando nos ponemos objetivos, metas y trabajamos todos juntos tirando para el mismo lado podemos hacer las cosas, y bien. Y esto, argentinos, no se trata de una cuestión menor».
«El Congreso fue la concreción de una utopía»
Con estas palabras se despidió ayer la presidenta honoraria del evento, La Senadora Cristina Fernández de Kirshner.
Texto: Carla Rizzotto, diario La Capital
Foto superior: Enrique Rodríguez
Panorámicas: Gomez Fiori