Fidel Castro desempolvó su uniforme verde olivo el viernes al pronunciar un discurso en un mitin político con estudiantes en la universidad capitalina, aunque sin sus insignias de comandante en jefe.
Fidel Castro desempolvó su uniforme verde olivo el viernes al pronunciar un discurso en un mitin político con estudiantes en la universidad capitalina, aunque sin sus insignias de comandante en jefe.
Sin dejar de apuntar contra los EEUU, remarcó que la guerra nuclear podría iniciarse
por un ataque de este último a Irán. (Foto: AP)
El ex mandatario, quien lucía sano y enérgico, leyó un mensaje en el cual fue intercalando opiniones propias sobre el tema que acaparó su atención en estas semanas: una potencial guerra nuclear en Medio Oriente y los efectos catastróficos que tendría para toda la humanidad, incluyendo naciones pobres y alejadas.
“Le ha correspondido a Cuba la dura tarea de advertir a la humanidad del peligro real que está confrontando. En esa actividad no debemos desmayar”, expresó el líder de 84 años, quien se recupera de una enfermedad que lo tuvo al borde de la muerte y lo obligó a delegar el poder en 2006.
El acto comenzó en la mañana muy temprano, esquivando el sol del verano tropical, y miles de personas, sobre todo los estudiantes -el ciclo lectivo comenzará el lunes venidero- se congregaron frente a la escalinata del “Alma Mater”, la estatua que identifica a la Universidad de La Habana, donde Castro estudió hace más de 60 años, cuando se lanzó a la vida política.
“Frente a los escépticos nuestro deber es seguir librando la batalla, me consta que un buen número de personas están tomando conciencia de la realidad”, agregó en su discurso de 45 minutos, en relación a la campaña antibélica que encabeza.
Desde su reaparición hace algunas semanas, Castro fue tomando paulatinamente los atributos simbólicos que antaño lo identificaban como comandante en jefe y líder revolucionario: primero, sólo fue una camisa de vestir verde olivo; luego, otra de corte militar, para pasar ahora a un uniforme con su gorra. Aunnque todavía no volvió a lucir las insignias con la estrella y los laureles sobre sus hombros, con su grado.
En julio de 2006 entregó el poder a su hermano Raúl Castro y durante años no apareció en público, hasta el mes pasado, cuando comenzó a aparecer casi diariamente, a recibir personalidades y a conceder entrevistas.
Fidel Castro habló en la escalinata de la Universidad de La Habana | AFP
Esta vez, ante los estudiantes usó también lentes de aumento y bromeó sobre el tema al comienzo de su discurso, pues pocas veces los usaba en público antes de su enfermedad.
Castro leyó despachos cablegráficos y comentarios de analistas internacionales.
Su opinión es que la vida de los seres humanos en el planeta pende de un hilo si las potencias usan sus armas nucleares para agredirse entre ellas a partir de un ataque estadounidense-israelí contra Irán, bajo la excusa de que éste estaría desarrollando un programa atómico.
“Que la vida humana se preserve, que los niños y los jóvenes disfruten de ella en un mundo de justicia, que los padres y los abuelos compartan con ellos el privilegio de vivir la distribución justa de las riquezas materiales y espirituales que el hombre es capaz de crear con el fabuloso desarrollo de sus fuerzas productivas, la única alternativa posible”, manifestó Castro.
Fue su discurso discurso más significativo desde que regresó al escenario público, pronunciado en un mitin al aire libre, un formato de comunicación masiva que le dio figuración mundial antaño.
El máximo líder de la revolución mantiene su influyente cargo de primer secretario del Partido Comunista (PCC) y el título de Comandante en Jefe, pero desde que reapareció hasta ahora no ha tratado públicamente asuntos de política interna.
Acompañado de su esposa Dalia Soto del Valle, Castro acudió al acto de casi una hora, en el que fue presentado como primer secretario del PCC y al que no asistió su hermano Raúl Castro, ocupado en enderezar la compleja y grave crisis económica que agobia al país.
"Como en otros tiempos, al parecer lejanos y que a mi me parece fue ayer les agradezco (…) el apoyo moral que le están ofreciendo a esta lucha por la paz. Los exhorto a no dejar de batallar en esa dirección. En esta, como en muchas luchas del pasado, es posible vencer", dijo a los universitarios, que coreaban "¡Fidel! ¡Fidel! ¡Fidel!".
En una entrevista publicada esta semana en el diario mexicano La Jornada, Castro expresó que llegó a estar muerto, pero que resucitó en un "mundo de locos", y dijo tener mucho por hacer en momentos en que el planeta vive "la fase más interesante y peligrosa de su existencia".
Fuentes: AP / AFP
N. el E: Hay decenas de organizaciones advirtiendo de las consecuencias de una guerra nuclear, incluso en "pequeña escala". En 2009 se realizó la primera Marcha Mundial por la Paz y la No Violencia de la historia humana, que recorrió 100 países desde Nueva Zelanda hasta Argentina. Muchos cubanos adhirieron y participaron, Cuba como país no participó oficialmente.