El 5 de Junio se cumple un nuevo aniversario del Día Mundial del Ambiente.
NUEVAREGION.COM · por Victor Bocco
Buen momento para reflexionar sobre esta problemática, pero antes, por mi inveterada condición de docente, no puedo dejar de señalar el por qué de la elección de este día.
Ello fue dispuesto por Resolución de la ONU del 15 de Diciembre de 1972, ya que el 5 de Junio de ese año, se abrió la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Medio Humano, en Estocolmo (Suecia), que originara el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).
El fin era generar conciencia sobre la necesidad de proteger y mejorar las condiciones del ambiente, en la búsqueda de un desarrollo equilibrado para las actuales y futuras generaciones.
Haciendo un análisis retrospectivo de estas décadas conmemorando el día, vemos que no hemos mejorado en la relación con el entorno, sino que hemos retrocedido a niveles peligrosos, que anuncian grandes males, todavía evitables, si actuáramos con racionalidad e inteligencia.
En Argentina, esta racionalidad debería plasmarse en intentar compatibilizar el mejoramiento de las condiciones sociales y la calidad de vida de sus habitantes, con un modelo productivo que no destruya absolutamente su propia base de sustentación, como el vigente.
En esa búsqueda común no hay lugar para fundamentalismos ni posiciones irreductibles, sustentadas por defensores a ultranza de la intangibilidad del ambiente o por los partidarios de un sistema productivista extremo que no contempla los mecanismos de regeneración y la capacidad de carga de los ecosistemas.
Muchas veces unos y otros, tratan de llevar agua para su molino, el que casi nunca es el molino de todos.
Debemos encontrar un modelo de desarrollo que satisfaga las necesidades comunes a escala humana y que persiga la sustentabilidad de muchos, antes que la rentabilidad de pocos.
Pero entiendo, que esa búsqueda debe estar impregnada de firmes convicciones e intereses nacionales, que en una discusión de conjunto, concreten el modelo de país en el que queremos vivir.
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Nota: El texto original fue escrito en 2012 en el 50 Aniversario