BUENOS AIRES, 22 Febrero. Noticias Xinhua
El óptimo control de la inflación en China tiene un impacto positivo para la economía mundial debido al importante peso de la producción que se genera desde el país asiático en las cadenas globales de valor, indicó hoy miércoles el economista argentino Jorge Marchini.
El vicepresidente de la Fundación para la Integración Latinoamericana (FILA) y profesor en la Universidad de Buenos Aires dialogó con Xinhua acerca de la tasa de variación del índice de precios al consumidor (IPC) del 2,1 por ciento interanual registrado por China en enero y que se contrasta con los altos niveles de inflación que experimentan otras economías alrededor del mundo.
«China tiene una enorme influencia en cuanto al control de su inflación, porque esta tiene efectos sensibles, significativos y a veces hasta fundamentales en muchas cadenas de valor y, por tanto, lo que ocurra en China tiene mucha importancia«, subrayó Marchini.
Para el economista, «China es hoy en un centro internacional fundamental para el equilibrio de la economía mundial y de la producción global«, por su relevante papel en las condiciones de oferta y demanda.
Para Marchini, entre los factores que podrían explicar el buen control del Gobierno chino sobre el aumento de precios se encuentran la reciente flexibilización de las medidas anti-pandémicas, un vertiginoso aumento de la productividad y la confianza de la población hacia las variables económicas.
«Por un lado, tenemos la magnitud de la oferta; el hecho del levantamiento de muchas restricciones por la pandemia ha generado no solo una capacidad mayor de movilidad de la población y de actividades, sino también, puntualmente, de producción», expresó.
«Esto también implica un mejoramiento de las cadenas de valor y abastecimiento global tan complejas actualmente, en el marco de los avances tecnológicos y en materia de logística que han llevado a este entramado de la producción mundial», agregó.
La capacidad de generar desde el Estado una buena expectativa a nivel social respecto a los principales indicadores económicos, fue otro de los elementos apuntados por el economista.
«Hay un elemento de confianza en el ordenamiento de la economía que tiene mucho que ver con la política pública y el asentamiento de una política de seguimiento de las variables económicas que puede hacer el Gobierno de China, y también la política financiera, es decir, el tema del manejo de tasas de interés, que tiene un efecto muy importante en general de la economía», enunció.
«Todos estos efectos generan una expectativa favorable en la economía de China y también, por supuesto, dan lugar a la idea de que la inflación no va a penetrar las condiciones de oferta en el mercado y que las condiciones generales de cadenas de pago y de producción no van a estar alteradas y, por tanto, esto también asienta la economía», acotó el experto.
Por otro lado, Marchini señaló el mejoramiento de la productividad de China en los últimos años, aludiendo a los avances tecnológicos que han permitido reducir costos en la producción y, por ende, en los precios de los bienes masivos.
En los países centrales, la inflación ha alcanzado niveles históricos que, a juicio de Marchini, se debe a factores como un «recalentamiento de la demanda» y a la relación financiera y comercial que tienen economías como las de Estados Unidos con el resto del mundo.
«Hemos visto el aumento de la tasa de interés por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos (FED, por sus siglas en inglés) que acarrea todo un efecto en la economía norteamericana y que apunta a una perspectiva de menor inflación, pero que genera mayor incertidumbre hacia un futuro», precisó.
«Aunque la inflación en este país parece revertirse en las últimas semanas, es una incógnita que está presente en la economía norteamericana, economía que tiene también algunos sectores con alto nivel monopólico y, por lo tanto, también traslada a precios, y sin ninguna otra posibilidad, porque el Estado no interviene, caso distinto de China, respecto al ordenamiento de esta condición de precios», agregó.
El vicepresidente de FILA advirtió sobre la predominancia de una «alta interdependencia económica mundial» por lo que las eventuales alteraciones en las cadenas de valor pueden ser «muy críticas». En tal sentido, señaló que las prácticas proteccionistas de «sálvese quien pueda» pueden resultar peligrosas a nivel internacional.
«Debe mantenerse, sobre todo, la fluidez de las relaciones internacionales, comerciales, económicas y políticas para poder mantener las ventajas que tiene este tipo de complementación internacional», concluyó.