Los aficionados al Dakar en África recordarán bien la última especial que se disputa “por placer” en el Lago Rosa, compuesta por unos cien kilómetros. Sin embargo, la etapa de hoy en la Provincia de Santa Fe hacia Carcarañá, ciudad natal de Ernesto Guevara, no era un mero trámite. En motos, Marc Coma ha logrado cómodamente su segunda victoria, la tercera para España, mientras que el piloto portugués Helder Rodrigues se ha adjudicado la última especial. En coches Giniel De Villiers accede al fin a la máxima distinción, después de haber padecido durante años el dominio de Mitsubishi en el Dakar. En esta 31ª edición, Volkswagen ha dado con la receta adecuada para el éxito: el Race Touareg se convierte en el primer diesel que se impone en la prueba más importante de rally raid, con la satisfacción añadida de contar también con el vehículo de Mark Miller en segunda posición. El sudafricano finaliza así su victoriosa carrera, logrando de nuevo el mejor tiempo de la especial. Robby Gordon, con su Hummer, completa un podio 100% anglófono.
227 kilómetros de especial separaban a Marc Coma de un segundo título en el Dakar. Y el español no ha defraudado en los tramos técnicos y rápidos entre Córdoba y Buenos Aires. Tres años después de su primera victoria en Senegal, al otro lado del charco, el catalán se adjudica el título de primer vencedor del Dakar sudamericano.
El piloto de KTM Repsol, que salió detrás de su rival principal Cyril Despres, al igual que los dos días anteriores, ha colocado bien su equipo y sus neumáticos antes de pasar con una modesta sonrisa la línea de llegada. El vigente campeón, así como adversario de Coma en la general, ha conseguido recuperar parte del tiempo perdido (más de hora y media) durante las 3 primeras etapas, que han resultado decisivas de cara a la victoria final, manteniéndose a la cabeza y recortando 2’25 a su distancia del líder.
Sin embargo, la pugna por la victoria de etapa se ha convertido en un duelo entre dos pilotos ansiosos por hacerse con el quinto puesto de la general: Helder Rodrigues y Pal Anders Ullevalseter, a los que les separaban tan solo 44’’ antes de la salida. El primero llegaba al CP1 (km 88) con una ventaja ínfima, pero preciada, de 3’’. El portugués fue aumentando su distancia frente al noruego, cuyo neumático trasero cada vez se resentía más. Dos años después de haberse impuesto en Nema, Mauritania, Rodrigues se adjudica su tercera especial en el Dakar, sacando finalmente 2’07 a Ullevalseter y 2’41 a Despres.
En la clasificación general, Marc Coma se impone en la categoría de dos ruedas, con un cómodo margen de 1h25. David Frétigné, con su pequeña Yamaha 450 cc, finaliza el rally con un bien merecido tercer puesto a 1h37.
En coches, a la salida de la última especial, el suspense sobre la victoria final estaba reducido a la mínima expresión. Las instrucciones dictadas por Volkswagen al equipo se habían cumplido escrupulosamente el día anterior. A menos de que se produjera un enorme e improbable error de conducción o una avería mecánica, nada podía impedir que Giniel De Villiers se alzara campeón del Dakar. Sin embargo, el piloto sudafricano ha decidido asumir un riesgo calculado, con el fin de poner el broche de oro a su magnífica trayectoria este año.
La victoria de especial con meta en Carcarañá, último galardón prestigioso sin dueño, ha llevado a Guerlain Chicherit a correr la recta final del rally tan rápido como su inicio, intentando en esta ocasión mantener sus ruedas por debajo del centro de gravedad del X3. Sus esfuerzos se han visto recompensados con el mejor tiempo intermedio en el CP1, pero, al final, se ha impuesto el ganador de la prueba. En los puntos de cronometraje siguientes, De Villiers ha tenido que lidiar con Leonid Novitskiy y Krzysztof Holowczyc. Con un dominio absoluto, tanto en pistas sinuosas y rápidas, como en las de familiar arena, el sudafricano ha sabido aprovechar su destreza habitual. Con su cuarta victoria de especial este año, la duodécima de su carrera, De Villiers finaliza con una ventaja de 8’59’’ frente al segundo de la clasificación general, su compañero de equipo Mark Miller.
Nicolas Gibon no ha vacilado mucho en su posición de líder de la categoría T2. En la última jornada de la carrera, el joven piloto de Toyota consigue un nuevo mejor tiempo en la categoría Producción. Con su 14º puesto en la clasificación general, Gibon finaliza tranquilamente la pugna a distancia contra Xavier Foj, que acaba la aventura a más de una hora en total.
En camiones, la última etapa podría haber estado marcada también por las consignas de equipo en el clan Kamaz, con la posibilidad de que Vladimir Chagin igualara el viejo récord de Karel Loprais, de seis victorias. Sin embargo, la marca rusa ha dejado que los dos pilotos corrieran a sus anchas. El terreno le ha dado la razón a Firdaus Kabirov, que consigue el mejor tiempo del día, adjudicándose su cuarta etapa de esta edición y conservando el liderazgo de la clasificación general. Con una ventaja de 3’39 frente a Chagin, Kabirov se alza vencedor de su segundo Dakar, tras una primera victoria en 2005. El “Zar” tendrá que esperar.
En cuanto a los cuatriciclos, el checo Josef Machacek (Yamaha) se adjudicó la primera clasificación general de quads de la historia del Dakar en Sudamérica, 2h34’ por delante del argentino Marcos Patronelli (Can-Am) y 7h42’34 por delante del polaco Rafal Sonik (Yamaha). Al término de la 14ª especial, el español José María Peña (Yamaha) se alza vencedor de etapa, 8 segundos por delante del Gran Campeón Machacek.
Fuente: Dakar.com