Una oficial de policía acabó lesionada tras recibir el impacto de uno de estos elementos. Al final, contuvieron las agresiones y desbarataron a los revoltosos
Ayer por la madrugada, la policía de San Lorenzo tuvo que concurrir a un domicilio de calle Malvinas Argentinas, en el barrio 2 de Abril, tras recibir denuncias de los vecinos por la realización de una fiesta clandestina.
Al llegar hasta el sitio indicado confirmaron la veracidad de la información, por lo que en cumplimiento con las normas vigentes y en aplicación del protocolo sanitario anticovid, se solicitó a los presentes terminar con tal reunión.
La respuesta fue una lluvia de insultos, piedrazos y botellazos que los parroquianos comenzaron a lanzar sobre los uniformados.
Producto de tal barbarie, una oficial resultó herida con un golpe en una de sus piernas. Además, uno de los coches recibió daños.
Tras retomar algo de calma, los policías entrevistaron al propietario de la finca, un hombre de 30 años, quien fue detenido.
Los agentes debieron solicitar refuerzos antes de emprender dicha actuación.