Los enfermeros se llamaban Mario Vignoll y Daniel Lugli, fallecieron en San Lorenzo y Rosario, respectivamente.
Al dolor por las decenas de miles de víctimas del COVID-19 en Argentina, se suman la pena y preocupación de las muertes entre el personal de salud.
El Miércoles 7 de Octubre otros dos profesionales de la salud fallecieron en la provincia de Santa Fe, que sigue con alto contagio diario.
Mario Vignoll tenía apenas 56 años. Trabajaba en el hospital Granaderos a Caballo de San Lorenzo.
Daniel Lugli tenía 62 años, como enfermero actualmente se desempeñaba en el Instituto Cardiovascular de Rosario (ICR).
Liliana Pontia, presidente del Colegio de Enfermeros del sur de Santa Fe, declaró que “el enfermero está muy expuesto por estar muchas horas con pacientes de COVID-19. Muchas veces tienen doble empleo y están cansados“.
En relación con la muerte de Vignoll, la titular del Colegio sostuvo que “fue muy rápido su desenlace” y agregó: “estamos muy conmovidos”.
Tanto el personal de salud como las autoridades y los vecinos de bien, insisten a todos que hay que respetar las medidas de prevención para bajar la cantidad de contagios.
Lamentablemente algunos medios opositores muy irresponsables y también varios grupos de alienados, siguen impulsando las «marchas del contagio» mediante excusas políticas o consignas irracionales. A la vista están las consecuencias. Desde que empezaron las marchas de alienados, se dispararon los contagios y, proporcionalmente, la ocupación de camas y las muertes.
