El acto fue realizado el Sábado 14 de Junio 2008 en la plaza de 27 de Febrero y Laprida la cual fue bautizada con el nombre del médico rosarino conocido mundialmente como el idealista que dio la vida por sus principios.
Al acontecimiento asistieron miles de personas. La estatua fue creada por Andrés Zerneri y se trata de la primera escultura del revolucionario de cuerpo entero que se instala en un espacio público de Argentina.
La escultura de Ernesto “Che” Guevara, de cuatro metros de altura y 1,5 tonelada de peso, fue inaugurada hoy en Rosario, su ciudad natal, que se erigió en epicentro de los homenajes al líder revolucionario a 80 años de su nacimiento.
Al acto realizado en una plaza bautizada con el nombre del Che en 27 de Febrero y Laprida asistieron miles de personas, mientras en varios puntos de la Argentina, en Cuba y otras naciones también se rindió homenaje al médico rosarino.
La estatua fue creada por el artista plástico argentino Andrés Zerneri y se trata de la primera estatua del revolucionario de cuerpo entero que se instala en un espacio público de Argentina.
Para su realización admiradores de todo el país donaron llaves y objetos de bronce que fue fundido para construir el monumento, que muestra al Che, con uniforme y boina, y la cabeza inclinada hacia su hombro derecho.
Participaron del acto el trovador cubano Gerardo Alfonso y el General Rogelio Acevedo González, quien fuera compañero de lucha de Guevara y forma parte del gobierno de la isla; el autor de la escultura, la hija del guerrillero, Aleida Guevara March y el cantante uruguayo Daniel Viglietti.
La municipalidad local, el gobierno de la provincia de Santa Fe, la Embajada de Cuba en la Argentina y distintas organizaciones no gubernamentales -agrupadas en la Multisectorial de Solidaridad con Cuba-, se embarcaron hace tiempo en la organización de las actividades para celebrar el histórico acontecimiento.
La escultura llegó a Rosario en barco tras una travesía por el Paraná desde Capital y luego fue acompañada por una caravana hasta la zona de emplazamiento.
El punto de reunión fue el predio ferial municipal (ex Rural, de Oroño y 27 de Febrero) ubicado en el Parque Independencia, donde muchos jóvenes tenían previsto quedarse hasta mañana.
Cabe destacar que la plaza del Che se construyó en base a un anteproyecto del arquitecto argentino Claudio Verkstein; el cubano José Antonio Choy y el crítico internacional de arquitectura Roberto Segre, mientras que el desarrollo del proyecto y la conducción técnica la efectuó la Secretaría de Planeamiento municipal.
Para definir el diseño de la plaza se recurrió a distintas metáforas arquitectónicas que hacen referencia a la vida o el pensamiento del Che. Así, América Latina, campo de la lucha internacional del Che, está representada en la planta de la plaza adoquinada, cuyo contorno es la forma estilizada de América del Sur y Central.
También presenta un recorrido peatonal bajo nivel de vereda que remite metafóricamente al río Paraná, por el que llegó la familia Guevara Lynch a Rosario en 1928.
En el lugar está emplazada la estatua realizada por el artista Andrés Zerneri; una figura en bronce del Che que mira en dirección nor-noroeste, en un «diálogo de miradas» con otra estatua ubicada en Santa Clara, Cuba, en sentido inverso hacia el sur-sureste, estableciendo un diálogo visual simbólico entre los dos únicos monumentos que recuerdan al Che en América Latina.
La plaza del Che está ubicada en el amplio predio del parque Hipólito Yrigoyen, en el que existen sectores en los que se evoca a luchadores del campo social como Juan Ingalinella, a escritores y creadores como Constancio C. Vigil y a artistas comprometidos como Lucio Fontana. Por ello se decidió dedicar también un importante lugar al Che Guevara en este espacio.
En este marco, la Facultad de Ciencias Médicas de la Universidad Nacional de Rosario preparó una distinción post mortem para Ernesto Guevara, la que le fue entregada a su hija, Aleida Guevara March.
Con la misma idea, la Facultad de Ciencias Políticas y Relaciones Internacionales rindió homenaje a Alberto Granado, el médico que acompañó a Guevara en su viaje por el continente, quien llegó especialmente a la ciudad para participar de las celebraciones.
Fuente parcial: El Ciudadano, Rosario3