Cada cultura tiene su bebida típica. Hoy, te proponemos un tour por los tragos más tradicionales, populares y exóticos de distintas naciones.
El momento del brindis, del trago entre amigos o, simplemente, de la degustación individual son gestos universales que no conocen fronteras. Aunque sí distintas modalidades de disfrutarlos y diferentes sabores.
Las opciones son muchas y variadas. Sólo tienes que escoger tu favorita, alzar la copa y… ¡salud!
Francia, para todos los gustos: champán, coñac, anís y pastis
El burbujeante champán o champañaes, sin dudas, un clásico francés conocido en el mundo entero. Producido en la región de Champagne (sobre todo en los alrededores de las ciudades de Reims y Épernay), se trata de un vino espumoso elaborado conforme al método “champenoise”. Es posible visitar las bodegas de marcas tradicionales como Moët & Chandon y Mumm.
Francia es también famosa por sus diferentes tipos de brandy (aguardiente obtenido a través de la destilación de vino). El más famoso es el coñac (o cognac), oriundo de la región del mismo nombre. Las marcas más populares son Martel, Rémy Martin, Hennessy y Courvoisier(el favorito de Napoleón). Otra opción es el armagnac, que está hecho de uva de la zona sudoeste y tiene un proceso de añejado más prolongado. Por último, el calvados es un brandy realizado a partir de la manzana, típico de la Baja Normandía.
El anís se obtiene de la destilación de varias hierbas entre las que se encuentra justamente el anís. De sabor fuerte cuando se toma seco, llega a producir quemazón en la garganta por sus cerca de 45 grados de graduación alcohólica, pero mezclado con otras bebidas da un sabor dulce y anisado. También se consume mezclado con agua, lo que le da un color blanco. La marca emblemática del anís francés es Pernod.
El pastis (se pronuncia “pastí”) es un licor producido a partir de alcohol etílico, hierbas y flores, al que luego se perfuma con anís y se endulza con regaliz. Se consume frío, muchas veces con hielo, como refresco en las jornadas cálidas. Es característico de Marsella y Provenza. Ricard es el más famoso representante.
Más información:
» www.champagne.com
» www.maisons-champagne.com
» www.cognacetapes.com/
» www.cognac-world.com
» www.pernod-ricard.com
Inglaterra: gin
¿Qué sería del Martini, el Negroni o el Gin Tónic si los ingleses no hubieran modificado la receta original de la ginebra para adaptarla a su paladar? Por suerte, en el siglo XVIII nació el gin (también conocido como London Dry Gin), hoy la base de muchos cócteles en todo el mundo.
Este aguardiente tiene una graduación alcohólica de entre 43º y 47º y se obtiene por destilación de la cebada, rectificado con bayas de enebro y aromatizado con cardamomo, angélica y otras hierbas que le dan su fragancia y aroma característico (corteza de cassia, lyrio, cáscara de naranja).
Un lugar para visitar: la destilería Black Friars (en Plymouth, a tres horas en tren desde Londres), ubicada en un antiguo monasterio, donde se produce la tradicional gin de marca Plymouth desde 1793.
Más información:
» www.plymouthgin.com/
» www.gordons-gin.co.uk
Italia: aperitivos, sambuca y grapa
Para los italianos, el aperitivo antes de la cena es un rito ineludible. Nunca faltan fiambres, quesos y, por supuesto, una bebida alcohólica.
Una de las opciones más tradicionales es el fernet, de color oscuro, aroma intenso y sabor amargo y fuerte. Se elabora a partir de varios tipos de hierbas que son maceradas en alcohol de uva, filtradas y añejadas en toneles de roble. En Milán, en la sede de la histórica Destilería Fratelli Branca, se conservan una extraordinaria cantidad de objetos y maquinarias que cuentan la historia de un emprendimiento familiar que se convirtió casi en sinónimo de fernet.
El colorido campari es otro un clásico. Sus orígenes se remontan a 1860 en Milán, concretamente en el Café Campari, donde Gaspare ofrecía a su clientela un aperitivo de su invención realizado a partir de extracto de alcachofa o alcaucil, hierbas, especias y ralladuras de frutas y cortezas como naranja, quinina y ruibarbo. Según la tradición, el color rojo se obtenía del caparazón de tortuga, aunque hoy se utiliza cochinilla como colorante.
La sambuca es un licor dulce y fuerte a base de anís, típico de Italia. Puede servirse pura, después del café o simplemente para tomar un trago. Se suele acompañar de uno o dos granos de café, la llamada “mosca”, que realzan el gusto al masticarlos mientras se la bebe. También se puede servir con hielo o flambeada, así como añadirla al café.
Producida tradicionalmente para evitar el desperdicio del bagazo tras el fin de la temporada del vino, la grapaes un licor que habría nacido en el antiguo Egipto, si bien desde hace 400 años se elabora en la península itálica tal como la conocemos hoy. Es originaria de la ciudad de Bassano del Grappa, cerca del Monte Grappa. Los productores más conocidos en el mercado italiano son Domenis, Nonino, Berta, Alexander, Poli y Nardini. Se sirve habitualmente fría y pura. A veces, se la añade al expresso (que entonces se denomina “caffè corretto”).
México: tequila y algo más
El agave, o maguey, es la hierba que da de beber a todo México. De ella se extrae el tequila, la bebida nacional. Marcas célebres como El Jimador y José Cuervo se exportan a todos los continentes. La forma más popular de consumir el tequila es colocar una pizca de sal en la boca, luego se toma el tequila y por último se chupa un limón, para refrescar un poco el paladar.
Del agave también se obtienen otras dos bebidas típicas. Una de ellas es el mezcal, de color rojizo y sabor más ahumado que el tequila. Suele envasarse junto con un gusano que, cuenta el mito, habita las plantaciones de maguey. Justamente Gusano Rojo es el nombre del mezcal más popular en México. La tercera bebida que se extrae del maguey es el pulque, un líquido dulce y de bajo contenido alcohólico que fue hasta hace no tanto la bebida del pueblo, luego desplazada por la cerveza.
Más información:
» México: la ruta del tequila
Vino, un clásico global
La oferta vitivinícola mundial es cada vez más amplia y son muchas las regiones que ofrecen variedades distintivas. A la par del crecimiento de las bodegas y del aumento de los productos que ofrecen, surgió también el denominado enoturismo, que combina la posibilidad de degustar los mejores vinos del mundo con visitas a los más bellos lugares de Europa, América, Oceanía y Sudáfrica.
Visitar las llamadas “rutas del vino” es una experiencia inolvidable para todos los sentidos. Cada vez más elegidas y transitadas, ofrecen la excusa perfecta para conjugar el placer por las bebidas de calidad con el gusto por viajar y conocer lugares nuevos