8 DE MARZO, DÍA INTERNACIONAL DE LAS MUJERES
Este 8 de marzo conmemoramos el Día Internacional de las Mujeres en memoria de las obreras asesinadas en Nueva York hace 94 años, por reclamar la jornada laboral de 8 horas y mejores condiciones de trabajo. Este día marca un hito en la lucha de las mujeres que seguimos reclamando y movilizándonos por nuestros derechos, es un día de lucha, aunque los sectores oficiales pretendan convertirlo en un mero adorno del calendario. Es otro día de lucha como los que venimos protagonizando las mujeres en todo el país: en las calles, las rutas, el campo, las escuelas, la universidad, las fábricas, las oficinas, los hospitales, los barrios... Este 8 de marzo conmemoramos el Día Internacional de las Mujeres en memoria de las obreras asesinadas en Nueva York hace 94 años, por reclamar la jornada laboral de 8 horas y mejores condiciones de trabajo. Este día marca un hito en la lucha de las mujeres que seguimos reclamando y movilizándonos por nuestros derechos, es un día de lucha, aunque los sectores oficiales pretendan convertirlo en un mero adorno del calendario. Es otro día de lucha como los que venimos protagonizando las mujeres en todo el país: en las calles, las rutas, el campo, las escuelas, la universidad, las fábricas, las oficinas, los hospitales, los barrios… De los múltiples derechos que reclamamos es necesario mencionar al menos dos que miden la posibilidad de vivir en una sociedad más democrática: el trabajo en condiciones y remuneración digna y el derecho a decidir sobre nuestros cuerpos, nuestra sexualidad y maternidad.
Es necesario continuar demandado la igualdad entre hombres y mujeres en lo laboral, político y legislativo, sin embargo es clave que las mujeres luchemos activamente en los ámbitos públicos y privados para cambiar las reglas de juego con las que se construyó y construye un orden social capitalista y patriarcal de sometimiento y discriminación, que se ve crudamente profundizado con las políticas neoliberales de ajuste, aplicadas por los gobiernos de turno.
Ni pocas ni locas, las mujeres del mundo nos hemos organizado para llevar adelante la 3ª Huelga Mundial de Mujeres para denunciar que la globalización actual además de capitalista y neoliberal, es también sexista. Este tipo de globalización, que se construye sobre la desigualdad, acentúa la feminización masiva y creciente de la pobreza y provoca un aumento de las múltiples formas de violencias perpetradas contra las mujeres. El actual orden político y económico confina a millones de mujeres a la marginalidad y provoca una mayor exclusión, quedando sometidas a opresiones múltiples relacionadas con la clase, la etnia, orientación sexual, edad, etc.
Esta situación sólo se puede explicar por la articulación de sistemas mundiales de opresión capitalista y patriarcal, que se nutren y se refuerzan mutuamente para mantener a la inmensa mayoría de las mujeres en inferioridad cultural, desvalorización social, marginación económica, invisibilización de su existencia y de su trabajo y la mercantilización de su cuerpo. Denunciar y desarmar estos sistemas que generan exclusión y dominación, que perpetúan el miedo, el odio a la diferencia y justifican la violencia; luchar por las reivindicaciones de la Marcha Mundial a las que se suman los numerosos movimientos sociales: anulación de la deuda externa, fin de programas de ajuste estructural, impuestos a los capitales, mayor presupuesto para salud y educación, legislación para eliminar la pobreza, medidas concretas para la eliminación de todas las formas de violencia contra las mujeres, etc; construir las bases de otra sociedad libre de pobreza y de violencia, son los desafíos que nos movilizan cotidianamente a las mujeres en una lucha compartida con todos/as los/as explotados/as y oprimidos/as.
Nuestro cuerpo de mujer ha sido un espacio conquistado por las políticas de Estado, por la Iglesia, las fuerzas represivas, la justicia, la medicina, y otras instituciones del poder. Convencidas de que “lo personal es político”, defender el derecho a decidir sobre nuestros cuerpos es parte de la tarea de construir un proyecto de vida autónomo, cuyas condiciones debe garantizar el estado.
En este marco, seguimos reclamando a los gobiernos nacional y provincia, a la justicia, a la iglesia, a la legislatura lo siguiente:
♀ Fuentes de trabajo digno para todas
♀ Aumento del subsidio de los planes Trabajar y Ley 2128
♀ Guarderías estatales y públicas para las madres trabajadoras y desocupadas
♀ Cumplimiento efectivo de la Ley 2222 de Salud Sexual y Reproductiva
♀ Educación Sexual con perspectiva de género en las escuelas de todos los niveles
♀ Promulgación de una Ley que permita la ligadura de trompas y vasectomía en hospitales públicos
♀ Promulgación de una ley que permita la interrupción voluntaria del embarazo en los hospitales públicos
♀ Esclarecimiento de todos los crímenes que en la región y el país se vienen acrecentado hacia las mujeres
♀ Justicia en la muerte de Silvia Roggetti
♀ Atención digna y con soluciones rápidas para las víctimas de maltrato, violencia y abuso
♀ Atención a niños y niñas de la calle
♀ No discriminación a lesbianas, bisexuales, gays,
♀ Penalización del acoso sexual
♀ Trato digno a las Mujeres que visitan presos
♀ Legislación y amparo material a las Mujeres con S.I.D.A.
♀ Vivienda para mujeres jefas de hogar
♀ Cumplimiento de la cuota alimentaria
♀ Juicio y castigo de los responsables de la dictadura militar y restitución de los niños/as nacidos/as en cautiverio y secuestrados/as
♀ No aumento de la edad jubilatoria
un aporte de los Humanistas de Neuquén
