La Fifa negó hoy que el encuentro del lunes entre Brasil y Camerún por la última fecha del Grupo A del Mundial vaya a ser controlado especialmente ante el temor de un posible arreglo.
Delia Fischer, portavoz del ente rector del fútbol, aseguró hoy que el partido está catalogado como cualquier otro y negó que exista indicio alguno sobre una amenaza de manipulación.
El director de seguridad de la Fifa, Ralf Mutschke, habló el viernes de un “partido de riesgo”.
Pero Fischer aclaró hoy que la expresión de Mutschke se refería a todos los encuentros en los que participa un equipo ya eliminado, como es el caso de Camerún.
Brasil, anfitrión del Mundial y líder de la zona con cuatro puntos, necesita un buen resultado para garantizar su pase a octavos. México, con cuatro, y Croacia, con tres, también aspiran a meterse entre los 16 mejores, mientras que Camerún cierra sin puntos.
La Fifa confirmó hoy que el árbitro del partido entre Brasil y Camerún será el sueco Jonas Eriksson, quien ya dirigió el choque entre Ghana y Estados Unidos, que terminó con victoria de 2-1 para los norteamericanos.
El otro duelo del Grupo A, entre Croacia y México, será arbitrado por el uzbeco Ravshan Irmatov, que ya tuvo a su cargo el encuentro entre Suiza y Ecuador, con triunfo de 2-1 para los europeos.
Asimismo, el gambiano Bakary Gassama, arbitrará el choque entre Holanda y Chile, que definirá el primer lugar del Grupo B. Será la primera vez que un árbitro de Gambia dirige un partido de un Mundial.
FG_AUTHORS: La Capital – Ovación