El canciller García Margallo sostuvo que la movilización de ayer fue “fue un éxito de convocatoria" y admitió el riesgo de una secesión. El gobierno regional pidió que se permita el plebiscito
El canciller García Margallo sostuvo que la movilización de ayer fue “fue un éxito de convocatoria" y admitió el riesgo de una secesión. El gobierno regional pidió que se permita el plebiscito.
El ministro de Relaciones Exteriores español, José Manuel García Margallo, reconoció hoy el éxito de la masiva cadena humana realizada ayer en Cataluña a favor de una consulta soberanista y expresó su preocupación ante la escalada del desafío secesionista.
Las declaraciones de Margallo rompieron sorpresivamente con la posición que hasta ahora venía manteniendo, sin fisuras, el gobierno español del presidente Mariano Rajoy, que había minimizado el clamor independentista de los catalanes.
Las declaraciones de Margallo rompieron sorpresivamente con la posición que hasta ahora venía manteniendo, sin fisuras, el gobierno español del presidente Mariano Rajoy, que había minimizado el clamor independentista de los catalanes.
“La secesión de Cataluña sería una amputación extraordinariamente dolorosa”
José Manuel García Margallo
El jefe de la diplomacia española, en cambio, reconoció que la cadena humana independentista “fue un éxito de convocatoria, organización logística y comunicación”.
Además, Margallo sostuvo que esos actos le produjeron “una enorme preocupación y gran tristeza”.
“La secesión de Cataluña sería una amputación extraordinariamente dolorosa”, dijo el jefe de la diplomacia española, quien por primera vez admite el riesgo de que la próspera región nororiental se independice de España.
Ante este desafío, Margallo abogó por “convencer” a los catalanes que quieren la secesión de que “estarán mejor dentro que fuera de España”.
“Tendrán que aceptar cuál es la propia realidad que se vive en Cataluña"
Francesc Homs, vocero del gobierno catalán
El canciller, quien compareció en conferencia de prensa en Madrid junto a su par portugués, Rui Machete, afirmó que el gobierno “tiene que escuchar a la calle” pero consideró que no es allí donde se debe hacer política sino apostando por el “diálogo dentro del marco constitucional”.
Asimismo, Margallo llamó a hacer una “reflexión” sobre la organización territorial de España aunque sin abordar una reforma constitucional.
Una multitud de catalanes enlazaron sus manos ayer en una cadena humana que atravesó de norte a sur la costa de la región nororiental para reclamar una consulta independentista, coincidiendo con la celebración de la “Diada”, el día nacional de Cataluña.
La imagen de la movilización pacífica dio la vuelta al mundo y elevó la presión para que Rajoy negocie la celebración de una consulta secesionista en 2014, como exigen los catalanes.
Antes de las declaraciones de Margallo, sin embargo, la primera respuesta oficial a la movilización llegó por medio de la vicepresidenta del gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, quien restó importancia al reclamo soberanista y ratificó el rechazo del gobierno a un referendo que considera inconstitucional.
“El gobierno tiene la obligación de escuchar a todos los españoles, también a los que se quedaron en casa, a esas mayorías silenciosas”, dijo la “número dos” del Ejecutivo.
“El gobierno habla y dialoga dentro de la Constitución, habla y dialoga con todas las comunidades autónomas, porque somos el gobierno de toda España”, enfatizó Sáenz de Santamaría.
En la misma línea, el ministro de Interior español, Alberto Fernández Díaz, señaló que “una mayoría silenciosa de catalanes no se ha manifestado”, al tiempo que rebajó de 1,6 millones a 400.000 la cifra de participantes de la cadena humana.
“Ha sido mucha gente, pero no hace falta multiplicar por cuatro para que parezcan más”, sostuvo en referencia a los datos proporcionados por el gobierno catalán, según declaraciones a la agencia de noticias EFE.
“Hay que escucharles, se esté de acuerdo o no. Haríamos mal en minimizar este asunto, y el gobierno lo está haciendo y creo que se equivoca”, aseguró por su parte el líder del Partido Socialista (PSOE), Alfredo Pérez Rubalcaba.
El vocero del gobierno catalán, Francesc Homs, replicó a Sáenz de Santamaría que la “mejor forma de saber si la mayoría silenciosa que no fue a la cadena humana está en contra de la independencia es dejarla votar en un referendo”.
“Tendrán que aceptar cuál es la propia realidad que se vive en Cataluña", enfatizó Homs, tras reiterar que el compromiso del gobierno catalán es convocar la consulta en 2014.