Mayo de 1886, 25.000 volantes explicaban la necesidad del trabajador de ganar el derecho a 8 horas de trabajo.
Cuenta Osvaldo Bayer:
Mayo de 1886, 25.000 volantes explicaban la necesidad del trabajador de ganar el derecho a 8 horas de trabajo.
El autor de estos volantes, junto a otros cinco valientes, fueron condenados a muerte y ejecutados sumariamente por las corporaciones.
Sobre esta sangre primordial descansa el derecho de huelga Argentino, “un derecho”..
Esto sucedido hace mucho en el patio de alguna casa convulsionada, que nacía dolorosamente.
En la nuestra, joven y pusilánime, Yrigoyen cambió el nombre a esta conquista pírrica: de “Día de los Trabajadores”, pasó a ser “Fiesta del Trabajo”. Así, convenientemente, el Primero de Mayo se convirtió en día de fiesta…, para dormir.
Llegó Perón y la remató: le quitó toda relación con los mártires, la despersonalizó: se llamará “Día del trabajo”, sentenció. Y a continuación, doblegado por la derecha, nos espetó en lenguaje despectivo y excluyente: “mocosos imberbes”.
Como lejana cacofonía, la calle retomó viejos cánticos:
La ley se ha convertido en oposición a los derechos de la gente.
A la razón más sorprendente, la ley la absorbe y la niega.
Las leyes de esta alma ciega y el juez, son delincuentes….
¿Entonces, será por eso que un Presidente democráticamente elegido (Yrigoyen), fuera el responsable de la más grande matanza de argentinos, incluso más que las dictaduras que le precedieron?.
¿Entonces, será por eso que el pueblo argentino jamás salió a la calle cuando los militares se levantaron y los destituyeron?.
¿Entonces, será por eso que nuestros presidentes derrocados no fueron asesinados por los dueños de las tierras (y de todo), ni se inmolaron en defensa de sus principios republicanos, sino que huyeron como r…. de Casa de Gobierno?.
¿Será por eso que la Ley y sus orfebres tornan en opositores al derecho a la vida digna, libre de AGROTÓXICOS?
¿Será por eso que el Concejo Deliberante de la Ciudad de Bandera, Santiago del Estero, cerró sus puertas hace un año y medio…, y no quiere saber nada con el pueblo?
¿Será por eso que nuestro Intendente, Sr. Oscar Gorosito, nos mostró la espalda de la venalidad política que consiente, que tolera, que no controla?
¿Lo entendimos, lo entendemos, lo entenderemos?
¿Entender…, qué…?
Que a pesar de todo debemos someternos a la justicia y pedir, desde abajo, mas justicia.
Porque nosotros… no somos sino víctimas, simples múltiplos electorales estafados en su buena fe y condenados por corporaciones institucionalizadas que todo lo corrompen y lo avasallan.
Porque ellos…, son los mismos.
Osvaldo Bayer simboliza, no una huella, sino al camino.
Por Victor Krieger Fabbroni
victordisc@hotmail.com