Una triste alegría. Enorme tristeza por tener que dejar la competencia, no por una falla o debilidad humana; sino por que la máquina le dijo basta. Federico Gut debió abandonar el Dákar. Pese a eso, el balance es altamente positivo y ya se piensa en el 2012.
La web oficial del Dakar no funciona muy bien que digamos desde que arrancó la competencia. En la noche del viernes no daba cuentas del arribo de Gut, pero ya ocurrió anteriormente. Igual, el paso por el recorrido lo encontraba en el puesto 7 de 12 way point, pero en los siguientes no figuraba y en cambio sí lo hacían los que dos que venían detrás suyo, entre ellos el uruguayo Sergio La Fuente. Era un mal presagio, que ayer se confirmó con el abandono, a solo 120 kilómetros del final del recorrido.
Todo venía bien, más allá de la dureza de la etapa. Gut se había acostumbrado a las empinadas trepadas y las bajadas posteriores, hasta que advirtió el fuego debajo del chasis. Ahí mismo se tiró del cuatri sin sufrir daños personales e intentó apagarlo con arena, que por cierto no le faltaba en el lugar. Pero no hubo caso, no pudo hacer nada y el Polaris 850 quedó abrazado por las llamas. Ayer mismo era recogido por uno de los cuatro camiones escoba de la organización y quedó claro que hasta ahí llegó su utilidad.
La bronca de Gut era porque estaba entero físicamente y la experiencia no lo había agotado como les está pasando a muchos pilotos que siguen en competencia. De hecho, varios de ellos estaban ayer aún por las dunas en el tramo de Iquique a Arica. La buena noticia que recibieron es que la ASO decidió para hoy acortar el tramo de especial, reduciéndolo de 631 a 273 kilómetros. La etapa 7, de Arica a Antofagasta, pasó de ser la más larga a una de las más cortas.
Pero Gut ya no estará pendiente de la hoja de ruta. Ayer a las 2 llegó al vivac en una camioneta de la organización, luego de ser rescatado en un helicóptero que lo dejó en un puesto de control. Y por la tarde empezaba el camino de regreso con parte de la familia que lo acompañó en el trayecto. Con bronca, pero feliz de hacer sido protagonista de la madre de todas las carreras.
Fuente: La Capital / Agencia Met