Por qué el proyecto que se debate en el Congreso afecta programas e iniciativas que impactan en la vida de la gente.
La Cámara de Diputados votó a favor del Presupuesto 2019 en medio de fuertes protestas en la calle. La iniciativa, realizada bajo la exigencia del FMI de alcanzar el «déficit cero», establece fuertes recortes en áreas sensibles, ya sea en términos nominales o reales, con incrementos por debajo de la inflación.
Con una inflación promedio estimada en el 34% para 2019, y un 2018 que cerrará cerca del 45% (44,8%, según el REM del Banco Central), el presupuesto destinado al CONICET estaba previsto en 16.444 millones de pesos, solo un 27% más que los $12.900 millones que tenía durante este año.
La oposición dialoguista presentó como un logro un refuerzo presupuestario de $500 millones, pero eso lleva al aumento interanual a solo el 31,3%, muy debajo de la inflación esperada. Es decir, un ajuste real.
Esta situación se repite en otros refuerzos presupuestarios que logró la oposición en comisión. El Plan Nacional para la Erradicación de la Violencia contra la Mujer, dependiente del Instituto Nacional de Mujeres (INAM) recibió $30 millones más, pero el organismo dedicado a combatir la violencia de género sigue teniendo un presupuesto sensiblemente inferior, ya que apenas pasa de los $211,5 millones de este año a $264,3 millones en 2019. Un 25% más en contexto de inflación por arriba del 40 por ciento, un recorte de casi 15 puntos.
Lo mismo ocurre con la ex SEDRONAR, dedicada a combatir la drogadicción. La oposición dialoguista logró un refuerzo de $100 millones a los $1.192 millones asignados previamente(ahora, casi $1.300 millones). Su presupuesto «creció» de los $1.123 en 2018, apenas un 15% más. En términos reales, se trata de un ajuste de 20 puntos.
Asimismo, el Hospital Posadas, que fue noticia en el último año por los masivos despidos de profesionales de la salud, no pasa mejor suerte. El presupuesto otorgado por Nación asciende solo un 17% nominalmente de cara al año próximo, pasando de $3.780 millones a $4.423 millones. Un recorte de 20 puntos interanuales.
Ni los trasplantes de órganos se salvaron. El INCUCAI, que poseía un presupuesto de poco más de $206 millones durante 2018, llegará al año próximo con $239,1 millones: un 19,5% de aumento nominal y 20 puntos de ajuste real.
Y si estos fueron recortes reales, en otras áreas sensibles los ajustes son nominales. En el Ministerio de Educación que comanda Alejandro Finnocchiaro, la partida destinada a Infraestructura y Equipamiento desciende de $9.290 millones a $2.614 millones. Un 71% menos. Solo para igualar la inflación, el presupuesto en esta área debería ser cinco veces lo que propone el Gobierno y aprobó Diputados.
Los jardines de infantes que tanto sirvieron para criticar el gasto estatal tampoco tuvieron en esta ley una mejor suerte. El fortalecimiento edilicio de estos institutos baja de $6.063 millones este año a $2.528 millones. De nuevo: un recorte nominal del 58% y debería triplicarse para al menos empatarle a la inflación.
Mariano Parada Lopez / ELDESTAPEWEB.com