En esta historia un niño deposita su energía en la construcción de un planeta alejado de la tierra. Lo piensa todo: los colores, cómo funcionarían las cosas, quiénes lo habitarían, de qué forma se puede llegar al mismo, y la razón existencial de sus dos protagonistas: El Niño Tiburón y La niña de Fuego.
Calificación: * * * En esta historia un niño deposita su energía en la construcción de un planeta alejado de la tierra. Lo piensa todo: los colores, cómo funcionarían las cosas (maquinarias, automóviles, de qué van a estar hechos los ríos y las montañas), quiénes lo habitarían, de qué forma se puede llegar al mismo, y la razón existencial de sus dos protagonistas: El Niño Tiburón y La niña de Fuego.
Por Anabel Donnet para Rosarinos.com
Soñar es una de las actividades que más suelen relajarnos. Es armar un mundo totalmente diferente al actuado. Es armar el mundo en donde nuestros deseos se hacen realidad. “Soñar no cuesta nada”, nos decían para no desanimarnos en nuestra búsqueda interna de una existencia más feliz. Pero para este gran soñador el precio fue más alto de lo pensado ya que tuvo que poner en juego su propio cuerpo para salvar su invento: el Planeta Drul.
Es por ello que El Niño Tiburón y la Niña de Fuego (David Arquette y Kristin Davis) bajan a la tierra envueltos en dos terribles tornados y se llevan volando al creador de ese otro mundo en donde es real encontrarse con un planeta constituido a base de leche y galletas. Los amigos super héroes quieren que duerma y sueñe allá arriba para que vuelva la luz y la alegría al planeta Drull, pero claro el humano está tan nervioso y aterrorizado que no hace más que gemir y gritar. Está incapacitado para resolver así, tan drásticamente, el problema.
La oscuridad sigue ganando batallas y las demandas de los super héroes se hacen cada más imperiosas. Es que la Niña de Fuego (que en la traducción se llama La Niña De Lava, ya que su cuerpo está compuesto por lava de volcán) no sabe por qué a hizo así tan destructiva: todo lo que toca lo incendia y nadie puede darle un beso o abrazarla porque le deja a piel quemada.
El Niño Tiburón también tiene sus dudas. Sabe, porque está escrito en el “Diario de Sueños”, que el vivía en el mar con su papá y que una gran tormenta destruyó el edificio en donde habitaban. Y que cuando se quedó solito flotando en un bote salvavidas inmediatamente fue rodeado por muchos tiburones. Pero éstos lo reconocieron, (¡claro, él siempre les daba de comer pescaditos!) y lo llevaron a la cueva en donde vivía la comunidad de tiburones. Allí le enseñaron a subsistir en el mar… por eso es que le salieron aletas, escamas y unos filosos dientes. Lo que no sabe es si su padre pudo salvarse y si é es e verdadero Rey del Océano.
¡Y todas esas respuestas están en su Diario! Rescatarlo no va a ser fácil porque el niño malo ya se a instalado en el planeta Drull y ha soñado mucha tristeza, odio y tinieblas. Hasta ha conseguido hacer maldito a MR. Eléctrico: una gigantesca pantalla redonda con la cara del maestro de la escuela y con piernas y brazos implantados con electricidad. Sus aliados son los enchufes y sus cables, que parecen víboras descomunales e inteligentes, que persiguen a los chicos para destruirlos. Razón por la que se torna casi imposible que pueda tener “dulces sueños” a fin de devolver la felicidad al planeta.
Por suerte nuestro niño idealista descubre que su gran poder es el de soñar con los ojos abiertos. Pero deberá enfrentarse a los sueños instantáneos del niño malo que aún quiere destruir al Planeta.
El final feliz es inminente. Y la enseñanza es que uno debe tener sueños generosos porque si sólo persiguen la felicidad propia nunca pueden ser gratos para los seres que lo rodean (por ejemplo había soñado diversión infinita a unos chicos que estaban en una montaña rusa, o sea que era un viaje del que no se podrían bajar nunca….¡y ya no daban más!).
La “novedad”, para llamarlo de alguna manera , frente al resto de las películas infantiles ofrecidas es que su director, Robert Rodríguez, ha mechado la historia con escenas en 3D. Esto la transforma en una aventura en sí misma para aquellos que nunca hayan experimentado esto de ponerse anteojos raros para mirar una peli.
Las aventuras del Niño Tiburón y la Niña de Fuego 3-D Título original: The adventures of Sharkboy and Lavagirl in 3-D Género: Aventuras Dirección: Robert Rodríguez Guión: Robert Rodríguez Interpretes: David Arquette, Cayden Boyd, Kristin Davis, Taylor Dooley, Taylor Lautner, George López Fotografía: Robert Rodríguez Música: Robert Rodríguez Montaje: Robert Rodríguez Origen: Estados Unidos (2005) Duración: 90 minutos Calificación: Apta para todo público Sitio Web: http://www.sonypictures.net/movies/sharkboylavagirl/ Horarios: Village 13:00 15:00 17:00 Showcase Rosario 12:00 14:10 16:15 18:20 |
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